Los accesos a la N-120 suman ya dos años y medio de retraso

Carlos Cortés
carlos cortés MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

El contrato decía que las obras no debían durar más de 15 meses

16 feb 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

La N-120 lleva más de tres años en obras en el tramo que atraviesa la comarca de Monforte. Cuando el Ministerio de Fomento adjudicó la construcción de media docena de nuevos accesos en los municipios de A Pobra do Brollón, Monforte y Sober se suponía que todo estaría terminado en el verano del 2009. Sobre el terreno, todo apunta a que las obras están ya a punto de acabar, pero el retraso acumulado es espectacular.

Este proyecto mejora la conexión con las poblaciones intermedias, una carencia que arrastra esta carretera desde que se puso en servicio hace veinticinco años. Fomento decidió invertir dinero en estas nuevas conexiones tres años después de que concluyese la construcción del tercer carril en buena parte del trazado entre Valdeorras y Monforte. De hecho, la construcción de esta media docena de enlaces suena a compensación, porque se hace precisamente en la única zona que se quedó sin ningún tramo de tercer carril.

El ministerio anunció en enero del 2008 la salida a concurso del proyecto. Contemplaba la construcción de un nuevo acceso en el municipio de Sober, cuatro en el de Monforte y uno más en A Pobra do Brollón. El precio de salida del concurso era de 6.993.504. Presentaron oferta treinta constructoras. La elegida fue la madrileña API Movilidad, que fue la que rebajó más el presupuesto inicial. Se hizo con el contrato a cambio de hacerlo solo a cambio de 4.650.680 euros. La adjudicación fue firmada el 30 de mayo y publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del 2 de julio.

En Ribas do Sil fue más rápido

En paralelo a este proyecto pero en un contrato distinto, el ministerio también puso en marcha la construcción de un enlace nuevo en Rairos, en Ribas do Sil, una población en la que las casas quedaron pegadas a la nueva carretera y con un acceso directo y poco seguro. El paso elevado y la pasarela peatonal del vecino pueblo de Noceda llevan meses operativas.

Las obras en la media docena de accesos nuevos de la comarca de Lemos fueron con más calma. Si se aplicase a rajatabla el plazo inicial, deberían haber estado terminados en el verano o el otoño del 2009 (en función de cuándo empezasen realmente las obras), pero en estos momentos llevan dos años y medio de retaso.

Unos pocos meses después de que empezase a ejecutarse este proyecto de accesos, Fomento anunció recortes generalizados en la inversión de proyectos de infraestructura, tanto entre los que solo estaban previstos como los que ya habían empezado.