Sergio Guitián y Hugo Madarnás guían al equipo en la liga nacional de juveniles
03 dic 2016 . Actualizado a las 14:10 h.El trabajo que realiza el Calasancio con la base -es el segundo club de la provincia después del CD Lugo con el mayor número de licencias en categorías inferiores- da sus frutos. Cada temporada van saliendo futbolistas con calidad más que suficiente para jugar en categorías superiores. En el equipo juvenil A de esta campaña destaca, sobre todo la sociedad que forman Sergio Guitián y Hugo Madarnás, dos futbolistas que habrá que tener muy en cuenta, porque además terminan esta temporada su etapa como juveniles.
Son ya varios los clubes, entre ellos el Lemos, los que ya los tienen en sus agendas. Los que ya los han visto jugar todos estos años y los siguen cada fin de semana en la liga nacional de juveniles sueñan con verlos jugar la próxima campaña en el campo municipal de A Pinguela. Los dos tienen talento y recursos técnicos que los avalan para competir en una Preferente o en una Tercera División.
Además de compañeros, los dos son grandes amigos, y como reconocen ambos «No nos entendemos el uno sin el otro en el terreno de juego», señalan.
Sergio Guitián es el director de orquesta de un Calasancio que está compitiendo con cierta solvencia en el campeonato -ocupa la zona media de la tabla-. Es un mediocentro de calidad, con una excelente visión de juego y con un golpeo magistral a la hora de ejecutar jugadas a balón parado.
El centrocampista abastece de balones a Hugo Madarnás, que destaca por su polivalencia, aunque su posición natural es la de extremo. Es ahí donde se encuentra más cómodo. «Teniendo a un futbolista con la clase de Guiti, que te surte con precisión de balones, resulta mucho más sencillo jugar», indica Madarnás.
Los dos se profesan una gran admiración, ya que llevan desde las escuelas juntos. Ambos recuerdan su salto al equipo juvenil. «Fue una campaña espectacular, porque ahí conseguimos el ascenso de categoría. En esta categoría fue en la que empezamos a competir de verdad», indica Sergio Guitián. Esta afirmación la secunda su amigo. «En juveniles es donde realmente puedes demostrar el talento que tienes», asegura Madarnás.
Los dos futbolistas hablan mucho tanto dentro como fuera del campo y se aconsejan. Los elogios entre ambos son constantes. «De Hugo destaco como virtud su golpeo y a la hora de darle un consejo, le digo que debe calmar sus nervios», dice con una ligera sonrisa.
«Guitián es sinónimo de clase y calidad. En cuanto a darle un consejo, tiene que calmar sus nervios», le replica Hugo.
Toda una garantía
La presencia de esta sociedad en el once titular es toda una garantía para el Calasancio. De hecho, antes con David Páez y ahora con Carlos Fontal son titulares indiscutibles. Sobre la trayectoria de su equipo en la liga -son décimos, con quince puntos-, los dos admiten que hay margen de mejora.
«Podíamos estar más arriba en la tabla. Tenemos que estar unidos a tope y corregir los errores, con el fin de enderezar el rumbo y alcanzar la permanencia lo antes posible», añade Madarnás.
Los jugadores están agradecidos al Calasancio. «Nos lo ha dado todo. En este club hemos crecido como deportistas y como personas. Esta entidad ha contribuido de manera decisiva a nuestra formación integral», comentan.
Madarnás y Guitián compaginan el fútbol con sus estudios. El primero cursa en Vigo prevención de riesgos laborales y el segundo está haciendo el ciclo superior de técnico de animación de actividades físicas y deportivas. «El fútbol es nuestra válvula de escape y nos mantiene en forma», dicen.
Ambos jugaron contra Carles Aleñá, al que consideran sucesor de Xavi Hernández
Hugo Madarnás y Sergio Guitián tuvieron la ocasión de enfrentarse en su etapa como jugadores alevines del Calasancio a uno de los juveniles con más proyección del fútbol español, Carles Aleñá, que el pasado miércoles debutó con el FC Barcelona en el partido de copa ante el Hércules. Ambos todavía mantienen contacto con el azulgrana, al que se enfrentaron en un torneo de peñas barcelonistas de Galicia en Tui.
«Fue emocionante, porque compartimos hotel con jugadores del Barça y de otros equipos de élite. No nos sorprende la progresión de Carles, porque ya demostraba cuando era más pequeño su talento. Estamos convencidos de que será el sustituto de Xavi Hernández», comentan.
Una de las preocupaciones en el fútbol comarcal es la ausencia de jóvenes promesas que den el salto a la élite. Hugo Madarnás habla claro y explica la razón. «Lo que hay ahora es mucho pasotismo y menos trabajo individual. Sí hay calidad en el fútbol local, pero falta compromiso, porque pocos son los que quieren sacrificarse para seguir progresando», puntualiza.
Su futuro
Los dos acaban su etapa en la base a final de temporada. ¿Dónde estará su futuro? Todavía no piensan a medio plazo, porque quieren vivir el presente. No obstante, no les disgusta la idea de coincidir de nuevo con Carlos Ingunza, en este caso en el Lemos. «Sería un honor jugar en el equipo de nuestra ciudad», concluyen. En los próximos meses, respuesta a la pregunta.