Polémica entre los usuarios habituales de la antigua N-120 por el cambio de prioridad en el cruce de Ferreira de Pantón
05 mar 2017 . Actualizado a las 20:26 h.Una señal de stop tiene enfadados a una parte de los conductores que todavía utilizan el trazado antiguo de la N-120 entre Ferreira y Següín, en el municipio de Pantón. El indicador cambia la preferencia en el cruce entre la carretera vieja y la nueva en el acceso a Ferreira por el colegio. Los que la usan habitualmente auguran que se trata de un cambio muy peligroso y que va a provocar accidentes.
La nueva señalización del cruce coincidió en el tiempo con el pintado de línea continua en todos los tramos en los que aún era posible adelantar en la N-120 entre este punto y Os Peares. Aquella medida, también controvertida, tuvo mucha repercusión porque afecta a miles de conductores todos los días. Los que tiene que hacer este nuevo stop son muchos menos. Y esa es precisamente la causa del cambio.
«Foi o Concello o que lle pedíu ao Ministerio de Fomento que cambiase o stop na saída da N-120 a Ferreira», admite el alcalde de Pantón. José Luis Álvarez. Hasta ahora, eran los conductores que salían de la N-120 para entrar en Ferreira los que tenían que detenerse para comprobar que podían incorporarse al trazado antiguo de la carretera y seguir su camino, hacia la izquierda en dirección a Ferreira o hacia la derecha hacia la parroquia de Següín y el alto de Guítara. Pero ahora la señal de stop obliga a detenerse a los que vienen de Següín por la carretera vieja.
En el Ayuntamiento pensaron que si una gran mayoría de los coches que pasan a diario por este cruce vienen de la N-120 no tiene sentido que sean esos los que tienen que detenerse, sino los que proceden de la vía menos utilizada. Así que pidieron a Fomento que cambiase el stop de sitio y en el ministerio les hicieron caso.
El riesgo de la inercia
Quienes creen que el cambio puede ser peligroso admiten que hay más tráfico desde la carretera nueva que desde Següín, pero recuerdan que la N-120 antigua llega a este cruce después de casi un kilómetro de recta en cuesta abajo. «Esa recta dá para baixar a unha velocidade considerable», explica un habitual de esta carretera. Hay que tener en cuenta además que por ahí circula básicamente tráfico local, conductores residentes en las localidades cercanas. Acostumbrados a hacer este recorrido, la inercia puede llevarlos a no darse cuenta de que al final de la cuesta abajo en recta tienen que detenerse para ver si vienen coches de la carretera nueva. Los que se incorporan desde la N-120, en cambio, ya habían tenido que reducir velocidad para tomar el desvío.
El alcalde cree que la decisión de cambiar las prioridades de circulación en este cruce es correcta. En todo caso, no descarta rectificar. «Haberá que ver como funciona e se producen problemas -promete-, desde o Concello falaríamos con Fomento para que volvan poñer o stop onde estaba».