
El deportista del Neka, Álex Camba, entrenará el sábado con la selección española
08 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Hablar de talento es hacerlo de Álex Camba. El joven deportista del Gimnasio Neka, de 18 años, participa este sábado en Madrid en un entrenamiento de la selección española de taekuondo. La calidad que atesora y el hecho de haber sumado medallas en todos los campeonatos nacionales y autonómicos desde mayo del 2017 han sido claves para que los técnicos de la federación lo hayan convocado.
Su carta de presentación es espectacular, y ahora mismo tiene intactas sus posibilidades de participar en el mundial de Taipei, que se celebrará el próximo mes de noviembre. Las opciones las tiene, sobre todo formando pareja con su compañera, Elena Varela. Ambos ocupan actualmente la segunda plaza del ránking nacional, a falta de la disputa de dos pruebas más, que serán el Open de Andalucía y el de España, que se celebrará en Alicante. En quince días se sabrá si logran los puntos necesarios para estar en esa cita mundialista.
El joven deportista está muy contento con esta convocatoria de la selección española, porque además puede ser el primer paso para que compita en un Europeo con este equipo. «Para mí entrenar con la selección española sénior es un sueño hecho realidad. La verdad es que estoy muy contento de como me está yendo esta temporada, en la que he conseguido medallas en todas las competiciones en las que he participado», señala Álex Camba.
Desde los siete años
El idilio de la joven promesa local con el taekuondo comenzó con tan solo 7 años. «La pasión por este deporte me vino después de ver las películas de Jackie Chan y de Bruce Lee, en la que tenían protagonismo las artes marciales. Recuerdo que cuando llegaba del colegio me sentaba con mi padre a verlas», añade Camba.
El hecho de que en su colegio ofrecieran la actividad de taekuondo también fue definitivo. «En el Colexio Ferroviario comenzó todo, y desde ahí di el salto al Gimnasio Neka», señala.
Álex Camba admite que esta modalidad deportiva tiene un nivel de exigencia importante, siempre y cuando el objetivo sea crecer y participar en la alta competición. «Es muy sacrificado. Yo hasta los 15 años no empecé a destacar, pero la constancia y el compromiso fueron claves», puntualiza.
Camba lo tiene muy claro, y por eso no pierde el tiempo. Cada momento del que dispone ahí está en el gimnasio o en el patio de luces del piso en el que vive en A Coruña, ciudad en la que estudia un grado superior de Técnico de Actividades Físicas y Deportivas. «Durante la semana entreno varias horas solo en el patio de luces. Valoré la posibilidad de ejercitarme en algún gimnasio, pero aquí en A Coruña no encontré ninguno que hiciera el trabajo que yo necesito. Los viernes, cuando llegó a Monforte, me meto en el gimnasio, y hasta el domingo. El que algo quiere algo le cuesta», indica.
Álex Camba acaba de contribuir a que la selección gallega de taekuondo se proclamara campeona de España el pasado fin de semana en Valladolid. El monfortino obtuvo la medalla de bronce en la modalidad de técnica.
En pocos años espera coronarse como campeón de España. Ahora mismo, sus dos rivales directos son Alejandro Martín, que acumula ya siete títulos nacionales consecutivos, y el vigués Alejandro Losada. «Cuando hablo con ellos, ya les digo que mi objetivo es ganarles a los dos. Empecé lejos, pero ahora ya estoy más cerca», concluye Álex Camba.
Un entrenador feliz
Si hay una persona feliz por la evolución de este taekuondista, ese es su entrenador. José María no tiene palabras para definir el talento que atesora su joven deportista. «Álex es un trabajador incansable, que tiene la cabeza muy bien amueblada. Cada cosa que le corriges, la interioriza de inmediato. Tiene todos los argumentos para llegar muy lejos», dice Vega.
El preparador local destaca la humildad. «Álex no va de divo, a pesar de haber subido en el último año a todos los podios. Es humilde, prudente y muy buena persona», concluye.
Hay que destacar que Álex Camba ya sabe lo que es ganar un campeonato de España. Lo hizo en el mes de diciembre de 2016, formando trío con José Roca y Carlos Rodríguez. Fue el primero, pero no será el último. Al monfortino le aguarda un futuro muy prometedor.