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Estreno sin premio en Taiwán

luis conde MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

CEDIDA

Álex Camba y Elena Varela quedaron eliminados en la primera ronda del mundial

16 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

No pudo ser. Los taekuondistas del Gimnasio Neka, Álex Camba y Elena Varela, no superaron la primera fase del campeonato del mundo que se disputa en Taiwán. A pesar de ofrecer una buena imagen y mostrar un gran nivel, las dos jóvenes promesas se quedaron en el puesto doce. Teniendo en cuenta que solo se clasificaban los ocho primeros, ya se quedaron sin estar en semifinales.

En esta primera fase acabaron en la duodécima posición, superando a países de la talla de Canadá, Brasil y Hungría. No obstante, por lo visto sobre el tapiz, tanto Álex como Elena merecieron acabar como mínimo décimos, ya que dos de las selecciones que los superaron, República Checa y Suiza, no fueron mejores.

A pesar de que no pudieron cumplir el objetivo de acabar entre los dieciséis mejores clasificados del mundo, los dos sacaron una lectura positiva de su presencia en una competición de estas características. «Lo hemos hecho bien, a pesar de no pasar de ronda. Para ser la primera vez que participamos en un mundial no está nada mal, pero a veces los nervios juegan una mala pasada. La experiencia ha sido increíble, y ahora lo que queda es mejorar y seguir trabajando», comentó Álex Camba.

Con ganas de repetir

En la misma línea se pronunció Elena Varela, que reconoció que le gustaría repetir. «Dimos lo máximo que pudimos, pero aquí hay mucho nivel. La experiencia ha sido bastante buena. Espero seguir mejorando y creciendo, porque mi objetivo es seguir asistiendo a campeonatos de este estilo», indicó Varela.

Una de las personas que vivió con más emoción la actuación de Elena y Álex fue su entrenador. José María Vega se emocionó al verlos saltar al tapiz. «Fue lo máximo. Tengo que decir que la experiencia fue positiva, y la lectura que sacamos es que aquí no hay nadie infalible, ya que incluso los coreanos y los filipinos, que son muy buenos, también cometen errores. Aprendimos mucho», señaló Vega.

El técnico admite que vive un sueño: «Estoy encantado y me emocioné mucho cuando los vi saltar a los dos a la pista. Hay que darse cuenta que comencé con ellos cuando tenían 9 años, y ahora ya se enfundan el traje de la selección española. Ahora, lo que toca es seguir trabajando para volver al mundial».