Treinta hectáreas sin uso del monte comunal de Bendollo serán alquiladas para plantar olivos

l. d. MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

ROI FERNANDEZ

21 nov 2018 . Actualizado a las 09:53 h.

Alrededor de treinta hectáreas de monte situadas en la parroquia quiroguesa de Bendollo, en su mayoría terrenos comunales, serán replantadas con olivos de variedades autóctonas. La iniciativa para la recuperación de esta superficie, hasta ahora sin ningún tipo de aprovechamiento, forma parte de un programa de movilidad de tierras y valorización del territorio que impulsa la Axencia Galega de Desenvolvemento Rural (Agader).

El subdirector de Mobilidade do Banco de Terras de Agader expuso el proyecto a los vecinos de Bendollo en una reunión celebrada en el centro social de esta parroquia, en la que también estuvo presente el alcalde de Quiroga y técnicos municipales y de ese departamento de la Xunta. «Os veciños amosáronse de acordo co proxecto de mobilidade de terras, polo que os técnicos de Agader continuarán coa identificación dos terreos situados en dúas zonas diferentes do núcleo», explica el Ayuntamiento en un comunicado.

Una vez delimitadas las dos fincas, se procederá al acotado y posterior desbroce de los terrenos. La Xunta se encargará de la limpieza de las fincas antes de ponerlas en arrendamiento. También establecerá, a través de Agader, las condiciones, el plazo y las cantidades que deberán abonarse en concepto del uso de esos terrenos. La titularidad seguirá siendo, en todo caso, de los vecinos de Bendollo.

La Xunta cubre los pagos

En la reunión con los vecinos los representantes de Agader avanzaron que el alquiler de las treinta hectáreas de monte comunal estará condicionado a la plantación de olivos con variedades propias de la zona de Quiroga. «Se o arrendatario non paga, a Xunta farase cargo dos pagos», precisa el Ayuntamiento. En ese supuesto, y una vez extinguido el período de concesión, «os terreos devolveranse en mellores condicións das que se atopaban inicialmente».

Agader trata de llegar a acuerdos similares con propietarios de terrenos para impulsar la puesta en valor de terrenos de cultivo y contribuir al mismo tiempo a la prevención de los incendios forestales. El acuerdo al que se llegó en Quiroga tiene un precedente en Sober, concretamente en la parroquia de Proendos, donde está previsto arrendar veinte hectáreas para pastizales y tierras de labor. El auge de la producción de aceite artesanal en la comarca de Quiroga motivó que se pusiese como condición para el arrendamiento la plantación de olivosa de variedades arraigadas en esa zona.