Sílice crea una nueva marca para apoyar a las personas con autismo y Vía Romana destina 1,5 euros de cada botella de su primer rosado a la lucha contra el cáncer
02 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.La recaudación de dos vinos que elaboran por vez primera bodegas ubicadas en la Ribeira Sacra se destinará, total o parcialmente, a iniciativas de carácter solidario. Sílice, proyecto con sede en Sober pero fuera de la denominación de origen, reservó un lote de sus tintos de la cosecha del 2017 para ayudar a la inserción laboral de personas con autismo. Por su parte, Vía Romana destinará parte de los ingresos de su primer rosado a la asociación de lucha contra el cáncer creada en Chantada.
«Es un vino especial para gente extraordinaria», dice Carlos Rodríguez, impulsor de Sílice junto a su hermano Juan Manuel y el enólogo Fredi Torres. El vino Sílice con el Autismo se podrá adquirir directamente a través de la bodega (info@siliceviticultores.com). Hay algo más de doscientas botellas de esta marca, que se comercializarán al precio de 30 euros. Y también algunos mágnum que rondarán los 60 euros. Todo lo recaudado pasará a una cuenta específica de la oficina de Abanca en Sober,
No es la primera iniciativa impulsada por Sílice para sensibilizar a la sociedad sobre el autismo. En el 2015 lanzó una campaña en las redes sociales en la que colaboraron bodegas y viticultores punteros en Galicia. Carlos Rodríguez está muy satisfecho del eco que despertó hasta ahora su última idea. «Todo el mundo está colaborando. La empresa proveedora de los corchos, la que se encarga de hacernos las etiquetas...», explica.
La recaudación por la venta del vino será en su totalidad para la comisión de apoyo a la inserción laboral de la asociación Trastornos do Espectro Autista de Vigo (Teavi). Carlos Rodríguez, que vive directamente esa situación en su familia, es un colaborador habitual de Teavi. «Creo que podemos hacer algo bonito. Aunque puede parecer poca cosa, sé por experiencia que para la asociación puede significar mucho», dice el bodeguero afincado en Vigo, vinculado por sus raíces familiares al municipio de Sober.
Cubrir los costes
Los vinos rosados están autorizados desde este año por el consejo regulador de Ribeira Sacra. El que elabora Vía Romana con fines benéficos es de la cosecha del 2017 y por eso no puede llevar todavía el sello de la denominación de origen. La próxima añada será la del 2018 y confían en que pueda lucirlo. «De esta primera experiencia hicimos algo más de 1.300 botellas. La idea es seguir creciendo y que siempre tenga carácter benéfico. Nosotros cubrimos costes de producción, el resto de lo que ingresamos es para la asociación de lucha contra el cáncer», explica el gerente de la bodega, Juan Luis Méndez.
El rosado, monovarietal de mencía, se comercializará en diciembre y por la venta de cada botella se reservarán 1,5 euros para la asociación chantadina de lucha contra el cáncer. En tienda, el precio oscilará entre 12 y 15 euros. El presidente de la asociación, Manuel Vázquez, agradeció en la presentación del vino el apoyo que les viene prestando esta bodega desde que echaron a andar en el año 2016.
los vinos solidarios
Sílice con el autismo
El tinto Sílice contra el autismo es de la cosecha del 2017 y acaba de ser embotellado por la bodega. Es uno de sus vinos de parcela, en las que se aplica cultivo biológico. Todos pasan por barrica Vía Romana Rosado
El primer rosado de Vía Romana se elabora con la variedad mencía en depósitos de acero inoxidable. La bodega busca un vino ligero y de corte juvenil
La recaudación
de Sílice será para la comisión de apoyo a la inserción laboral de Teavi
El rosado de Vía Romana saldrá cada año y siempre recaudara fondos contra el cáncer