Ultiman con la confederación hidrográfica la distancia adecuada para los pilares
04 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Nada mejor que la imagen de la pescadilla que se muerde la cola para ilustrar el debate interminable sobre la peatonalización del puente viejo. Nadie discute la conveniencia de cerrar al tráfico este monumento, que ya postulaba un informe de Patrimonio sobre su estado de conservación echado en el año 2007. Pero ningún grupo político, salvo Esperta Monforte, cree posible aplicar esa medida si no se levanta un nuevo viaducto. El PSOE se comprometió a hacerlo en las últimas elecciones y los preparativos ya están en marcha.
Técnicos de la Diputación se desplazaron recientemente a Monforte para realizar las primeras mediaciones sobre el terreno con vistas al diseño del puente previsto en el Malecón. El alcalde no se había pronunciado sobre este proyecto desde las pasadas elecciones municipales, cuando adquirió el compromiso de levantar un nuevo viaducto a la altura de la actual pasarela peatonal. En el último pleno municipal, sin embargo, Tomé confirmó que están en marcha los preparativos para la redacción del proyecto.
«Do que se trata é de gañar tempo con vistas á redacción do proxecto para que cando a súa aprobación estea en trámite non xurdan atrancos que obriguen a refacelo», señala. Los obstáculos podrían surgir si la actuación programada no se ajusta a las directrices de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil para este tipo de obras en el domino hidráulico. Técnicos de la Comisaría de Aguas y de la Diputación ya intercambiaron impresiones sobre las características que tiene que cumplir con arreglo a la normativa el nuevo puente sobre el Cabe.
Con estos contactos se trata principalmente de terminar la separación entre los pilares que debe tener el puente proyectado en el Malecón en una zona inundable como el casco urbano de Monforte. «Hai que ver se leva ou non piares sobre o río, e no caso de levalos o espazo que deben deixar para facilitar o paso da auga en caso de enchente», apunta Tomé.
El alcalde de Monforte, presidente a su vez de la Diputación de Lugo, solicitó el apoyo de los servicios técnicos del organismo provincial para despejar el camino con vistas a la redacción del proyecto y la posterior solicitud de autorización. La complejidad técnica preocupa más al gobierno municipal que la propia financiación de las obras, que en principio se costearían con los remanentes disponibles en el presupuesto municipal.
El viaducto será construido en el Malecón y permitirá cerrar al tráfico
el puente viejo
Esperta Monforte prepara protestas frente a lo que tilda de «aberración urbanística»
Esperta Monforte se ha significado en los últimos años por defender la necesidad de peatonalizar cuanto antes el puente viejo. El informe elaborado por Patrimonio en el año 2007 consideraba prioritaria esta medida, que también figura en el plan especial de protección del conjunto histórico. Pese a la coincidencia existente, todos los intentos que se llevaron a cabo en los últimos catorce años para cerrar al tráfico este monumento fracasaron.
En la etapa de Severino Rodríguez al frente de la alcaldía el equipo de gobierno también creía que el paso previo para la peatonalización era levantar otro viaducto sobre el Cabe en el Malecón. Entonces se escenificaron algunos contactos con el bipartito de la Xunta para conseguir la financiación necesaria, pero no se registró avance alguno en la elaboración del proyecto.
En la Feira Medieval
El PSOE parece dispuesto ahora a aprovechar su mayoría en la corporación, y el creciente peso político de Tomé, para sacar adelante esta infraestructura y liberar así al puente viejo del paso de vehículos. Esperta Monforte, por su parte, realizará una intensa campaña de protestas para tratar de frenar el proyecto. Desde esta formación califican la construcción del nuevo puente de «aberración urbanística» y preparan movilizaciones para denunciarlas.
La primera tendrá lugar en Semana Santa, coincidiendo con la Feira Medieval. Para Esperta Monforte, bastaría con llevar a la práctica una nueva regulación del tráfico para poder convertir el puente viejo en peatonal.