La Diputación aprovechará el cierre para resolver el problema del saneamiento
18 jul 2020 . Actualizado a las 17:22 h.Los clubes náuticos que puso en marcha la Diputación en el sur de Lugo en la recta final de la pasada década de los noventa son una fuente inagotable de sorpresas. La última afecta al que fue rebautizado recientemente como Ponte do Sil, que cerró por obras el pasado mes de diciembre aprovechando la finalización del contrato. Ahora trasciende que desde su apertura, hace veinte años, funcionó sin disponer de sistemas adecuados de depuración. El alcalde de Monforte, y presidente del organismo provincial, anunció que esta anomalía será corregida dentro de las reformas que se llevarán a cabo.
Tomé dio cuenta en el último pleno municipal de los motivos de la decisión sobre el cambio de nombre del lugar donde tiene su base del catamarán del cañón del Sil que tomó tras acceder a la presidencia de la Diputación. La concejala de Esperta Monforte, Maribel García, le había invitado a través de una iniciativa política a rectificar y mantener la anterior denominación de club náutico de Doade. El alcalde respondió que no se pueden situar en una parroquia de Sober instalaciones que pertenecen al municipio de Monforte. Al hilo de esta polémica, salieron a relucir los problemas de saneamiento.
«É unha mágoa que vostedes, que son tan ecoloxistas, se preocupen polo nome do club náutico e non polos problemas de depuración», respondió Tomé a la representante de Esperta Monforte. Desde el pasado 1 de diciembre, varios carteles pegados en el exterior de las instalaciones informan de su cierre temporal por la realización de mejoras. En principio, tanto estas reformas como la futura concesión tendrán que estar resultas para Semana Santa, cuando deberán reanudarse las rutas en el catamarán del cañón del Sil.
La situación del saneamiento de este club náutico propiedad de la Diputación sorprende por las diferentes figuras de protección que pesan sobre ese espacio de la Ribeira Sacra. No solo está catalogado como lugar de interés comunitario por la Rede Natura 2000. Desde el pasado año, forma parte del paisaje cultural para el que se solicitará la declaración de Patrimonio de la Humanidad.
Una situación anómala
Consultado al respecto, el presidente de la Diputación confirmó que en los próximos meses podrá «normalizarse» una situación cuando menos irregular que arrastraban las instalaciones desde su apertura. «A concesión do club náutico podíase prorrogar ata a convocatoria dun novo concurso, pero consideramos que o máis axeitado era aproveitar o peche para mellorar as instalacións», explica Tomé.
La unidad de proyectos de la Diputación recibió el encargo de escoger la fórmula más adecuado para resolver los problemas de depuración del club náutico Ponte do Sil. La solución consistirá, por lo que parece, en soterrar una instalación de reducidas dimensiones pero con capacidad suficiente para depurar las aguas residuales antes de su vertido al embalse del Sil. Hasta la fecha, las instalaciones disponían de una fosa séptica que no reunía las condiciones necesarias.
Las instalaciones de Augas Mestas permanecen inactivas por el mismo motivo
Los problemas de depuración de aguas residuales, y más concretamente la ausencia de estos sistemas, también están detrás de la controversia que mantiene inactivo otro de los clubes náuticos que abrió la Diputación en la etapa en la que decidió sacar partido de los «mares interiores» de la provincia. El complejo turístico de Augas Mestas, en el municipio de Quiroga, sigue cerrado debido a que el organismo provincial y la empresa que obtuvo la última concesión no se ponen de acuerdo sobre quién de debe costear el saneamiento.
Salvo cierres puntuales por obras, el club náutico de Ponte do Sil funcionó con normalidad pese a la ausencia de una depuradora. En el caso de Augas Mestas, y tras obtener la concesión de las instalaciones en el 2015, Tourgalia se encontró con que la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil no autorizaba la reapertura sin una condiciones adecuadas de saneamiento.
Rescate de la concesión
La empresa no está por la labor de realizar en solitario un desembolso de ese calado. Por su parte, la Diputación sostiene que es una obligación que recogía el pliego de condiciones. En vista del desacuerdo existente, el organismo provincial notificó a Tourgalia el inicio del procedimiento de rescate de la concesión que le fue otorgada en mayo del 2015.
No hay constancia de que los problemas de falta de saneamiento estén relacionados con la inactividad de los clubes náuticos que puso en marcha en su día la Diputación en el embalse de Belesar y en Belesar pueblo para los catamaranes del Miño.