Los embalses enfilan el fin de abril con algo menos de agua de lo habitual

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LEMOS

El embalse de Belesar, fotografiado el pasado mes de febrero, cuando estaba al 88% de su capacidad
El embalse de Belesar, fotografiado el pasado mes de febrero, cuando estaba al 88% de su capacidad ROI FERNÁNDEZ

23 abr 2021 . Actualizado a las 17:57 h.

Los embalses de la Ribeira Sacra terminan el primer mes de esta primavera con porcentajes altos de llenado, pero ligeramente inferiores a la media habitual en esta época del año. El mayor de todos, el de Belesar, en el río Miño, está al 63% de su capacidad, siete puntos por debajo de la media de los diez últimos años en esta semana de abril. La media general de los embalses gallegos es en estos momentos en el 74%, cuando la media habitual de los últimos años en este momento del año es del 78%.

En general, los embalses llevan unas semanas perdiendo agua. Después de las buenas cifras de lluvia de febrero, que superó ampliamente los litros habituales para ese mes, marzo terminó con un balance hídrico más pobre de de lo que cabría esperar. El resultado es que la curva de los embalses lleva varias semanas bajando de forma suave, pero continuada.

Belesar acumula en estos momentos 447 hectómetros cúbicos de agua, cuando a finales de febrero llegó a superar los 600, lo que en aquel momento lo acercó al límite de su capacidad, que está en 655. La evolución de la curva de llenado de este embalse marca una bajada que se prolonga desde mediados de marzo y que no se ha detenido en todo el mes de abril.

Belesar es el mayor embalse de la Ribeira Sacra, y también el que más volumen de agua es capaz de acumular en toda Galicia. El segundo más grande de la Ribeira Sacra es el de Santo Estevo, en la cuenca del SIl. Esta presa se encuentra ahora a un 83% de su capacidad máxima, muy cerca de la media habitual para esta época del año, que está en el 90%. Por sus características y las de la producción hidroeléctrica en el Sil, la curva de llenado de Santo Estevo es siempre muy irregular, así que es difícil analizar su evolución.

El único embalse del sur de Lugo cuyo nivel no depende en absoluto del aprovechamiento hidroeléctrico es el de Vilasouto, en el río Mao, que se utiliza únicamente para regular el regadío Val de Lemos. Por eso es más fiel para medir el curso hídrico del año. Esta semana, Vilasouto, que está en el municipio de O Incio, está al 85% de su límite, con 18 hectómetros de agua embalsada. Es el único que está por encima de la media de los últimos diez años, que en su caso es del 75%.