Estas zonas destacan en el Atlas de Morcegos de Galicia por su variedad de especies
03 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.La sierra de O Courel es conocida por su amplia biodiversidad vegetal y animal, pero no tanto por el hecho de ser uno de los territorios gallegos que concentran un mayor número de especies de murciélagos. El Atlas de Morcegos de Galicia -iniciado en el 2007 por iniciativa de la asociación Drosera- ha sido actualizado recientemente con nuevos datos y pone de manifiesto la importancia de O Courel en este terreno. La información reunida en este trabajo indica también que el cañón del Sil alberga un importante número de especies de quirópteros.
Para la realización del atlas, el territorio de Galicia se ha dividido en numerosas cuadrículas, en las que se van incluyendo las distintas especies de murciélagos observadas sobre el terreno en cada una de esas porciones del mapa. En cuatro cuadrículas que corresponden a la sierra de O Courel se ha registrado respectivamente la presencia de quince, catorce -en dos casos- y trece especies diferentes. Entre todas ellas suman una veintena de especies. Una cifra considerable, ya que en todo el territorio de Galicia están catalogadas actualmente veinticuatro especies.
Hábitats favorables
Roberto Hermida, biólogo de la asociación Drosera, señala que amplia variedad de especies que se registra en la sierra de O Courel se debe a que este territorio cuenta con diversos tipos de hábitats favorables para estos animales, así como con un clima apto. «Os morcegos son especies sobre todo forestais e onde hai zonas de bosque ben conservadas, como sucede no Courel, é onde se encontra unha maior diversidade», apunta. «Pero no Courel hai tamén moitas cavidades naturais e iso favorece a presenza de varias especies cavernícolas», añade. De este modo, en la sierra conviven murciélagos típicos de los bosques, como el nóctulo mayor (Nyctalus lasiopterus), con otros que son más propios de las cuevas, como el murciélago grande de herradura (Rhinolophus ferrumequinum).
En cuanto al cañón del Sil, en dos de las cuadrículas del Atlas de Morcegos de Galicia que corresponden a este territorio están registradas respectivamente doce y siete especies. Según Roberto Hermida, esta zona ofrece unas condiciones favorables para los murciélagos gracias a la presencia de importantes áreas de bosque autóctono y a las laderas rocosas del cañón, donde abundan las grietas que sirven de refugio a los quirópteros. «Pero o máis importante é que abundan as carballeiras e os soutos antigos, que son un hábitat moi propicio para estes animais», señala.
El biólogo recalca la importancia de los bosques como refugio de murciélagos y apunta que la presencia de unas notables masas arbóreas -junto con el clima local- hace que la península de O Morrazo figure también entre las áreas de Galicia donde vive un mayor número de especies. «A pesar de estar tan urbanizada e humanizada, esa zona pode compararse co Courel no que respecta á diversidade», agrega.
Un proyecto iniciado en el 2007 que se sigue desarrollando hoy
El hecho de que la sierra de O Courel se distinga en el Atlas de Morcegos de Galicia por su extensa variedad de especies se debe a las favorables condiciones ambientales de este territorio, pero también al hecho de que los muestreos realizados en esta zona fueron más numerosos que en otros lugares. «Por unha serie de circunstancias, nos últimos anos tivemos ocasión de facer moitas observacións na serra e iso axudou tamén a que se puidesen rexistrar moitas especies», puntualiza Roberto Hermida.
El inventario se basa sobre todo en las observaciones de campo realizadas por los miembros de la asociación Drosera. Para identificar las diferentes especies se hacen muestreos de las señales acústicas de estos animales, se realizan capturas con redes -de una forma similar a la utilizada para censar y anillar aves- y se efectúan revisiones en sus refugios habituales.
Áreas aún sin cubrir
En el Atlas de Morcegos, el mapa de Galicia ya está cubierto en gran parte de cuadrículas en las que se han hecho registros de especies, pero aún quedan amplias zonas en las que no se hicieron observaciones. «Levamos traballando neste proxecto desde o 2007, pero os nosos medios son limitados e aínda hai moito por facer», señala Hermida. Por otro lado, en muchas zonas ya investigadas hay que seguir haciendo observaciones para obtener un panorama más completo de las poblaciones gallegas de murciélagos. «Hai moitas cuadrículas nas que non rexistramos máis que dúas ou tres especies, ou unha soa, cando en realidade ten que haber máis», añade. Es el caso de la cuadrícula que comprende el casco urbano de Monforte, en la que de momento solo figuran tres especies.