La Ribeira Sacra, en el límite norte de una de las mayores serpientes europeas
LEMOS
Los expertos señalan que la culebra bastarda se está volviendo cada vez más escasa en los territorios de Galicia donde vive, como el sur de la provincia de Lugo
05 jun 2023 . Actualizado a las 19:34 h.El reptil que figura en la imagen situada sobre estas líneas es un ejemplar de culebra bastarda o de Montpellier (Malpolon monspessulanus) que fue fotografiado esta semana en una carretera del municipio de A Pobra do Brollón. Conocida en gallego como cobregón o cobra rateira, está considerada como la serpiente más grande la Península y una de las mayores de Europa, ya que los machos pueden sobrepasar los dos metros y medio de longitud. El ejemplar de la imagen mide cerca de 1,70 metros.
El biólogo Martiño Cabana, de la Asociación Galega de Custodia do Territorio, señala que en esta época del año no es raro ver ejemplares de esta especie en las carreteras. «Gústalles moito a calor e por iso son atraídas polo pavimento das estradas, porque lles axuda á termorregulación», explica. «Iso sucede sobre todo cos machos, que se moven máis para buscar femias», añade. Ese es el caso del espécimen fotografiado en A Pobra do Brollón. Los machos se distinguen por una mancha oscura en el dorso, conocida como «silla de montar».
Las culebras bastarda no se puede ver en toda Galicia, ya que no vive en la mitad norte del territorio, pero sí en la Ribeira Sacra y en las zonas bajas de la sierra de O Courel. «Está presente nas terras máis cálidas, nas provincias de Ourense e Pontevedra, e tamén no sur da de Lugo», señala Cabana. «Na zona de Sarria xa escasea moito e en lugares situados máis ao norte, como a comarca de Lugo ou a serra dos Ancares, non é posible vela», agrega.
Aunque no hay estudios específicos sobre el estado actual de las poblaciones gallegas de este ofidio, en los últimos años se ha vuelto más difícil avistarlo. «A impresión que temos é que está habendo un certo descenso poboacional —apunta a este respecto Martiño Cabana— e unha das causas pode estar nos atropelos que sofren nas estradas por ese hábito que teñen de buscar a calor do asfalto». El biólogo apunta que estos episodios son cada vez más frecuentes debido al aumento de vehículos y de tráfico, y al hecho de que se estén asfaltando muchas pistas rurales.
Pérdida de hábitat
Pero Cabana apunta también que la causa más importante del descenso de población de esta especie se encuentra probablemente en la alteración de su hábitat. «É unha especie moi vinculada ás zonas agrícolas, onde caza ratos e outros pequenos mamíferos», explica. «Co abandono do medio rural e avance da maleza, a cobra rateira ten cada vez menos espazos adecuados para a súa supervivencia», agrega. El biólogo señala que las plantaciones de eucaliptos y pinos también son desfavorables para este reptil.
Una especie inofensiva para los humanos, aunque tiene dientes capaces de inocular veneno
La culebra bastarda, pese a su aspecto imponente, es una especie inofensiva para los humanos. «Ás veces pode asustar porque é moi grande e porque os seus movementos son rápidos, pero é practicamente imposible que morda ás persoas e ademais é un animal moi tímido», señala Martiño Cabana. Si se siente acosada, puede levantar la cabeza y sisear de forma amenazante. «Pero o máis habitual é que a vexamos fuxindo, que é o que sucede a maioría das veces», precisa el biólogo.
Los ofidios de esta especie poseen dientes capaces de inocular veneno, pero están situados en la parte posterior de la boca. Para que puedan inyectárselo a una persona habría que introducir profundamente un dedo en su garganta. En el caso que se dé una circunstancia de este tipo, el veneno de la culebra bastarda es de baja toxicidad y no tiene efectos mortales. No obstante, si se llega a sufrir una mordedura con inoculación de veneno, es imprescindible someterse a tratamiento médico.
Distribución geográfica
El área de distribución geográfica de la especie se extiende por toda la península Ibérica, con la excepción de la mitad norte de Galicia y toda la región cantábrica. También está presente en la costa mediterránea de Francia y en territorios próximos, así como en el norte de Marruecos y Argelia. La dieta de estos reptiles consiste en pequeños mamíferos, lagartos y aves. A veces es mencionada como la mayor serpiente de Europa, pero en el continente hay otras especies —como la culebra de Esculapio, la culebra de cuatro rayas y la serpiente látigo del Caspio— que compiten con ella en longitud.