Iglesias supera la dureza de la tercera etapa y afronta el tramo clave del Dakar
LEMOS
El piloto monfortino Eduardo Iglesias completó con éxito la etapa 3 del Dakar, que aunque fue recortada de los 526 kilómetros inicialmente previstos a 326 kilómetros, presentó un desafío físico y técnico considerable.
«Fue muy dura, porque tuvimos unos 100 kilómetros de mucha piedra, lo que complicó bastante la conducción. También hubo algunas zonas más rápidas que permitieron recuperar algo de tiempo, pero en general fue un día exigente», comentó.
Además del tramo cronometrado, la jornada incluyó un largo enlace de 320 kilómetros, lo que sumó más kilómetros al contador del día y aumentó el desgaste tanto para los pilotos como para sus motos.
A pesar de ello, Iglesias mantiene su buen estado físico y mecánico, y se muestra optimista de cara a los próximos días.
El foco ahora está en la temida etapa maratón, que comenzará este miércoles Esta etapa es conocida por su complejidad, ya que los pilotos deberán completar dos días consecutivos sin asistencia mecánica, lo que exige un nivel extra de preparación y cuidado de sus máquinas. «Creo que esta etapa, junto con las 48 horas
crono será clave en este Dakar. Nos esperan dos días sin asistencia, y además tendremos que dormir en tiendas de campaña, lo que aumenta el desafío», detalló Iglesias.
El monfortino afronta el tramo decisivo con determinación, consciente de que cada decisión, tanto en el pilotaje como en el cuidado de su moto, será crucial para seguir avanzando en la clasificación.
Con su habitual optimismo, confía en superar con éxito la etapa maratón y continuar dejando el nombre de Galicia en alto en la competición más dura del mundo.