Grupos de voluntarios desbrozan el castro de Castrelao, entre A Pobra do Brollón y Monforte
A POBRA DO BROLLÓN
La asociación vecinal de Vilachá promovió una primera jornada de limpieza en octubre y organizará otra a finales de noviembre
31 oct 2021 . Actualizado a las 17:59 h.La asociación de vecinos de la parroquia de Vilachá de Salvadur -en A Pobra do Brollón- organizará el próximo día 27 una jornada de desbroce del castro de Castrelao, situado en el límite entre este municipio y el de de Monforte, para lo que pide la ayuda de los voluntarios que quieran colaborar. El colectivo ya hizo antes llamamiento con este mismo fin y se presentaron doce voluntarios de varias localidades que acudieron con sus propias máquinas desbrozadoras y ayudaron a limpiar de maleza una parte del antiguo asentamiento el pasado 16 de octubre. Los trabajos fueron supervisados por el arqueólogo Iván Álvarez Merayo.
El presidente de la asociación, José Castiñeira, dice que ante la buena respuesta que tuvo aquella convocatoria se decidió organizar una nueva jornada, ya que todavía queda mucho terreno por desbrozar. «O castro ten cerca de dúas hectáreas e como aínda hai moita superficie que limpar, os propios voluntarios que viñeron en outubro animáronnos a seguir», explica. Los que quieran sumarse a la iniciativa pueden contactar con la asociación a través del correo electrónico vilachasalvadur@gmail.com.
El colectivo vecinal tiene previsto solicitar una ayuda económica a la Diputación para completar este trabajo. Una vez que se haya desbrozado toda la superficie del castro, la asociación pretende realizar unos sondeos arqueológicos para obtener información sobre este yacimiento, que cuenta con importante sistema defensivo y un antiguo aljibe o depósito de agua. La entidad tiene también tiene previsto promover el castro de Castrelao -por el que pasa una ruta de senderismo de reciente creación- como atractivo turístico. «Ademais da importancia arqueolóxica deste xacemento, hai que ter en contra que o castro está situado nun lugar cunhas vistas espectaculares, a máis de setecentos metros de altura», dice Castiñeira.