El ancho del cauce será reducido para que el agua corra más
13 sep 2022 . Actualizado a las 20:20 h.El tramo del río Asma que pasa por el casco urbano de Chantada está siendo sometido estos días a un cambio de cara completo. Personal y maquinaria enviados por la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil trabajan sobre el cauce y las orillas para limpiarlo de la vegetación que en los últimos años ha ido creciendo tanto que frena el paso de la corriente e incluso ha formado tapones en algunos puntos. El Ayuntamiento de Chantada había solicitado formalmente la realización de estos trabajos hace dos años. En la confederación hidrográfica recuerdan que la proliferación excesiva de vegetación en esta parte del Asma es un fenómeno común desde que el río fue canalizado.
Las obras de limpieza del principal río de Chantada afectan a la mayor parte de su tramo urbano, en una línea de 1.300 metros de longitud que empieza en el puente de la antigua carretera de Ourense y termina en la depuradora de aguas residuales. El objetivo, explican en la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil es mejorar la capacidad de desagüe de este río y su conectividad longitudinal en este tramo para reducir el riesgo de inundaciones y avenidas. Los trabajos empezaron a principios de este mes, con la retirada de la basura acumulada en los últimos años en las orillas y también en el cauce. Después se centraron en la retirada de lo que los técnicos consideran vegetación sobrante.
En la inspección realizada en su momento para preparar el proyecto, los especialistas enviados por la confederación hidrográfica constataron que era necesario mejorar la capacidad del cauce para transportar agua y la composición de la vegetación de ribera. También comprobaron que en diferentes puntos había acumulaciones abundantes de madera y tapones aislados en todo el tramo urbano.
Desde que está canalizado
Esta situación, subrayan los portavoces de este departamento dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica «es un fenómeno que se ha repetido a lo largo de los años desde que se llevó a cabo su canalización a su paso por la localidad de Chantada». Esta configuración de las orillas favorece la la obturación del cauce a causa de la excesiva proliferación de vegetal de ribera y de especies botánicas potenciadoras de la sedimentación. Esta vegetación, explican en la confederación, «forma densas redes» que reducen el flujo de agua.
Para mejorar la situación, el proyecto en marcha propone reducir la anchura que tiene el cauce del río en los períodos de pocas lluvias. Eso debería conseguir que el agua baje a más velocidad y eliminará zonas que actualmente son de sedimentación, lo que debería evitar la acumulación de materia orgánica y la proliferación de vegetales que proliferan en los lugares con luz solar directa. También está previsto eliminar los tapones existentes y los restos de madera dispersos estos 1.300 metros de río.
Podas parciales
En las orillas, el personal que participa en estos trabajos hará resalveos (podas que eliminan el tronco principal desde su base, pero dejan brotes para que la planta no muera) y desbroces selectivos en los puntos en los que la vegetación invada el cauce. Los responsables del proyecto pondrán cuidado en proteger y potenciar el arbolado de las orillas capaz de proyectar sombra sobre el cauce.
De lo que se trata, resumen los máximos responsables de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, es de recuperar la situación natural del río. «Trabajamos en el río Asma con el objetivo de recuperar los procesos naturales del cauce —explica José Antonio Quiroga, el presidente de esta confederación hidrográfica—, de mejorar la continuidad longitudinal de un bosque en galería que impedirá la proliferación de especies herbáceas y arbustivas heliófilas no deseadas en el centro del cauce, además de incrementar el valor paisajístico de una zona urbana con mucho tránsito».
Las obras
Encargo a Tragsa
Los trabajos de limpieza del tramo urbano del río Asma tienen un presupuesto de 26.000 euros y fueron adjudicados por la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil a la empresa pública Tragsa. El Ayuntamiento de Chantada se encargó de solicitar los permisos necesarios a la Consellería de Medio Ambiente.
«O problema xorde cando se deixa que pasen 10, 15 ou máis anos sen limpar»
Al respecto de estos trabajos, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil explica que si se encargan ellos de esta actuación en el Asma es porque el Ayuntamiento les pidió su colaboración. «Colaboramos con los ayuntamientos que solicitan y demuestran la necesidad y la falta de medios —apunta Quiroga—, si bien la limpieza de tramos urbanos es una responsabilidad de la administración competente en materia de ordenación del territorio y urbanismo, es decir, competencia municipal».
Por su parte, el alcalde de Chantada, Manuel Varela, recuerda que el personal de mantenimiento de zonas del Ayuntamiento se ocupa de controlar la situación del río en la zona de O Sangoñedo, aguas arriba del tramo en el que están en marcha ahora los trabajos de limpieza. «O problema xorde cando se deixa que pasen 10, 15 ou máis anos sen facer limpeza», apunta.