La festividad religiosa, que tuvo que ser aplazada el año pasado a causa del confinamiento, se llevó a cabo esta mañana en la iglesia de A Régoa
06 abr 2021 . Actualizado a las 15:18 h.Este año Monforte de Lemos sí pudo celebrar la festividad del Martes de Pascua en la fecha que le corresponde, lo que no fue posible en el 2020 a causa del estado de alarma sanitaria y del confinamiento. La celebración del año pasado tuvo que aplazarse por este motivo al mes de julio. Los actos religiosos de hoy no pudieron llevarse a cabo en la iglesia de San Vicente do Pino —su lugar de celebración tradicional—, que todavía está cerrada a causa del largo proceso de rehabilitación que se inició en noviembre del 2019. La misa ofició por lo tanto en la iglesia de A Régoa. Tampoco pudo celebrarse la procesión, debido a las medidas de prevención sanitaria, pero se renovó la tradición del voto y de la bendición de los campos, característica de este festejo.
La misa del Martes de Pascua empezó a la hora habitual —a las once de la mañana— ante algo más de medio centenar de fieles. No se llegó por lo tanto a completar el aforo máximo permitido actualmente en la iglesia de A Régoa, que es de setenta personas. La celebración contó con la presencia del alcalde José Tomé y otros miembros del gobierno municipal, así como de la portavoz municipal del PP, Katy Varela, y de representantes de las fuerzas de seguridad. Durante el oficio religioso —en el que colaboraron varios integrantes de la cofradía de la Virgen de Montserrat y de la asociación vecinal del barrio de A Florida— se hicieron votos por el fin de la pandemia y se recordó a los fallecidos, y también se expresó el deseo de que la festividad se pueda celebrar el año próximo en condiciones normales.
La tradicional de ceremonia de la renovación del voto se llevó a cabo dentro de la iglesia y no en la capilla del Campo da Virxe, que es donde se celebra habitualmente. En respuesta a la pregunta formulada por el párroco Rafael Mella, el alcalde se comprometió a celebrar una vez más las fiestas del Martes de Pascua y del 15 de agosto, dedicadas ambas a la Virgen de Montserrat. Seguidamente, el párroco salió al exterior de la iglesia para cumplir la ceremonia de la bendición de los campos, en la que se pidió que las tierras de Monforte y de la comarca «rebosen de frutos abundantes». La celebración terminó con la interpretación del himno de Galicia a cargo de varios miembros de la banda municipal de gaitas, y con el canto de la Salve.