La talla, que se guarda en la iglesia de A Ermida, es de alabastro y data del siglo XV
21 mar 2024 . Actualizado a las 10:42 h.En la localidad de A Ermida, en Quiroga, está a punto de concluir la restauración de la imagen de la Virgen de los Remedios que se conserva en la iglesia de la parroquia, una pieza artística singular por varios motivos. Uno de ellos es su antigüedad, ya que data del siglo XV. Otro es el hecho de que la escultura está hecha de alabastro, un material de gran fragilidad. Y otro motivo es su origen, ya que todo indica que la escultura procede de Inglaterra.
Según explica el párroco Jesús Río Ramilo, una tradición oral local dice que la imagen fue llevada a este lugar por un peregrino francés que viajaba a Santiago. La escultura, apunta la leyenda, fue probablemente robada en algún recinto sagrado en el que se habría hospedado el peregrino, que cayó enfermo a su paso por Quiroga. La imagen, de acuerdo con esta fuente, habría sido encontrada después por un vecino de A Ermida.
Dejando aparte las leyendas, lo que parece estar claro es el origen inglés de la imagen de la Virgen de los Remedios. La pieza es mencionada como tal en un estudio de la historiadora alemana Karin Land, Die englischen Alabastermadonnen des Späten Mittelalters (Las Vírgenes de alabastro inglesas de finales de la Edad Media), publicado en el 2011 por la Universidad de Düsseldorf. Esta es hasta ahora la única publicación en la que se ha estudiado esta escultura. «Hay bastantes estudios sobre estas imágenes, que fueron algo muy característico de Inglaterra en esos tiempos», señala el restaurador Francisco Naranjo, que se encarga de rehabilitar la pieza.
La imagen fue sacada habitualmente en procesión en la popular romería que se celebra en la parroquia de A Ermida en la festividad de la Virgen de los Remedios, el 8 de septiembre. «É un milagre que se teñan conservado ata hoxe, sendo tan antiga e dun material tan delicado», comenta a este respecto el párroco. «Con todas as veces que saíu en procesión puido pasar que algunha vez se lle caese aos que a levaban e entón teríase perdido unha obra dun gran valor», añade.
Cuando haya concluido la restauración, la imagen no volverá a ser llevada en procesión. La Dirección Xeral de Patrimonio Cultural, que ha supervisado el proceso, ha determinó que desde ahora debe permanecer guardada en la iglesia y no ser movida de allí, a fin de evitar cualquier riesgo. «Nas procesións levarase unha réplica», agrega Jesús Río.
Ceremonia de coronación
La restauración de la valiosa pieza se lleva a cabo con vistas a la ceremonia de coronación canónica de la imagen de la Virgen de los Remedios, que se celebrará el 9 de septiembre de este año. Esta ceremonia contará con la participación del obispo Alfonso Carrasco Rouco. Para esta celebración, el consejo interparroquial pastoral de Quiroga y Folgoso do Courel, designó a unos padrinos, es decir, a las personas que se encargarán de portar la corona que el obispo colocará sobre la imagen de la Virgen. Los elegidos para desempeñar esta función son el sacerdote José San José Prisco —en representación de la Facultad de Derecho de la Universidad Pontificia de Salamanca— y la directora xeral de Patrimonio Cultural, Carmen Martínez Insua.
Una pieza relativamente bien conservada a pesar de su antigüedad y de la fragilidad del material
Según el restaurador Francisco Naranjo, la imagen de la Virgen de los Remedios de A Ermida —de 45 centímetros de altura— se encontraba en un estado que se puede considerar normal para una pieza de esta antigüedad que ha estado expuesta al culto durante siglos. «Fue repintada en algunos puntos para ocultar deterioros, pero en general no se encontraba en mal estado», dice.
En la restauración se pudo comprobar por otro lado que, en algún momento difícil de determinar, la imagen sufrió una rotura en el cuello. Para volver a unir la cabeza al cuerpo se le agregó una gargantilla con la inscripción «Ave Maria gratia plena» —la primera frase de la oración Ave María en latín—, grabada en letras góticas. Al limpiar la talla, por otro lado, se ha hecho más patente su policromía original. Otras alteraciones que sufrió la escultura consisten en unos añadidos que se le hicieron en la parte superior —para colocarle una corona de orfebrería— y en la inferior, para sujetarla a las andas en las que era llevada en procesión.
Los trabajos de restauración terminarán después de Semana Santa. Naranjo señala que para dar concluida la labor solo quedan algunos detalles menores. «Quizá alguna reintegración en el color dorado del pelo y poco más», explica. Cuando se haya completado el proceso, la imagen de la Virgen de los Remedios se expondrá en la iglesia de A Ermida sin los añadidos que se le colocaron en su día, de manera que ofrezca un aspecto lo más similar posible al que se considera que pudo ser el original.
Origen del crismón
La iglesia parroquial de A Ermida es también conocida por ser el lugar donde se descubrió en el siglo XIX el llamado crismón de Quiroga, una valiosa obra de arte paleocristiano que en la actual se guarda en el museo diocesano de Lugo. En el templo se muestra una réplica de esta pieza.