Cien años y tocando el acordeón

Francisco Albo
francisco albo MONFORTE / LA VOZ

SOBER

CONCELLO DE SOBER

Alfonso Llano fue cantero, capador y cartero, y ayer celebró con música en Sober su cumpleaños más especial

11 ene 2018 . Actualizado a las 16:48 h.

El municipio de Sober, conocido tradicionalmente por contar con numerosos vecinos centenarios, tiene ahora uno más. Alfonso Llano González celebró ayer su centésimo cumpleaños en la residencia de mayores junto con su hermana Flora -de 93 anos- su hijo Pedro, su nuera, sus nietas y otros parientes. Aunque padece problemas de visión y de oído, se mantiene en buena forma física -dice que anda cinco kilómetros a diario- y sigue tocando el acordeón diatónico, una afición de toda la vida. En la celebración demostró su pericia con este instrumento.

Alfonso Llano ingresó hace diez años en la residencia con su mujer Esperanza Álvarez Gay, fallecida en el 2011. Natural de Vilabalde -en la parroquia de Figueiroá- desempeñó a lo largo de su vida numerosos oficios: labrador, cantero, carpintero, capador, zapatero, mecánico de la fábrica de armas de A Coruña... Fue movilizado en la Guerra Civil y recibió una condecoración tras un ataque en Segovia.

Según cuenta su hijo, el centenario tenía vocación de maestro, pero las circunstancias de la vida le impidieron cursos los estudios necesario. Después de sus múltiples trabajos, fue contratado como cartero de enlace y repartió cartas y giros desde Monforte. En los inicios de la etapa democrática se convirtió en funcionario de Estado y siguió trabajando en Correos y Telégrafos durante unas tres décadas, hasta su jubilación. Hoy dice estar muy contento en la residencia, donde sus parientes los visitan cada dos semanas, y de vez en cuando sigue tocando el acordeón, como hizo muchas veces para sus amigos y vecinos.