«La gente aprovecha las guerras para sus propios objetivos»

Farizo Correa LUGO

LUGO

Entrevista | Gabriela Fole Nieto Nacida en 1934, hija de Desiderio Fole y sobrina de Ánxel, relata en un libro cómo pasó su padre la Guerra Civil confinado y las represalias que tuvo que sufrir una vez acabada ésta

25 ago 2003 . Actualizado a las 07:00 h.

. -Recordar la figura de mi padre, que creo que no se debe olvidar porque fue muy honesto y honrado. Yo le animaba a que lo escribiese él, pero nunca quiso por no recordar esos momentos tan trágicos de su vida. -¿Cómo se enteró de lo que cuenta en el libro? -Yo nunca supe nada, nací en 1934 y estuve mucho tiempo separada de mi padre. Cuando estaba escondido, mi madre me decía que estaba de viaje y yo me lo creía. Cuando ya estaba enfermo y se daba cuenta de que se iba a morir me lo contó, porque mi madre no lo hizo. -¿Cómo era su padre? -Era muy inteligente, Ángel siempre decía que el más inteligente de todos los hermanos era Desiderio. Pero por problemas económicos tuvo que ponerse a trabajar a los doce años en una notaría. Empezó siendo niño de los recados y la gente se reía de él. - ¿Cuál fue el motivo por el que su padre fue detenido? -Era afiliado al Partido Radical Socialista, pero ese no fue el motivo, ya que no tenía un puesto alto en política. La verdadera causa fue el hecho de que descubriese un desfalco en el Ayuntamiento de Lugo. El culpable creía que los documentos que lo implicaban estaban en nuestra casa y aunque no era cierto vinieron y registraron la casa. La prueba de su ignorancia es que a pesar de que había libros de Marx, no los reconocieron y se llevaron La Biblia en Lug o y La Dama de las Camelia s para implicarl e. -¿Entonces la causa no fue la política? -No, fueron más las rencillas y las envidias. Hubo casos horribles aquí y allá, la gente aprovecha las guerras para sus propios objetivos. De hecho, mi padre se salvó de la muerte gracias a dos falangistas, uno honrado y otro no, pero con él se portó bien. -¿Qué papel jugó su madre en todo esto? -Mi madre, Gabriela Nieto Chaín, era maestra y fue la primera alcaldesa de la provincia. Fue elegida alcaldesa de transición en Rábade, era de derechas aunque no estaba afiliada a ningún partido y muy religiosa. Pero en mi casa nunca hubo discusiones de política ni de religión, a pesar de que mi padre era agnóstico y de izquierdas. -¿Cómo recuerda el estallido de la guerra? -Yo era muy pequeña pero significó el final de nuestra vida de buen vivir. Nos confiscaron todo, hasta la radio. Mi abuelo era de la nobleza lucense, al contrario de mi abuela que era muy humilde. Era magistrado y fue fiscal en el Tribunal Supremo. Cuando abandonó a mi abuela y a sus hijos, el señorío de Lugo no la admitió. Se quedó sola y no tuvo quién le echase una mano. -¿Y el final? -Mi padre salió muy estropeado y casi ciego, en Lugo nadie le quería emplear porque tenía fama de rojo y tuvo que trabajar clandestinamente en A Coruña.