El núcleo de la villa experimentó una subida de más de 1.500 personas en los últimos 13 años La mitad de los vecinos vivían en la zona rural en 1991, y hoy sólo son el 30%
11 feb 2004 . Actualizado a las 06:00 h.La población de Sarria es cada vez más urbana y el campo pierde protagonismo, según registran las cifras comparativas del reparto de población desde el año 1991 hasta la actualidad. El municipio contaba hace 13 años con un censo de población de 12.437 personas, que a finales del pasado mes de enero era de 13.269. La diferencia es de 860 habitantes. El crecimiento más importante se ha producido en el casco urbano. Los 6.202 ciudadanos que residían en la capitalidad municipal en 1991 son 7.797 trece años después, casi 1.600 personas más. La tendencia de la población se mantiene al alza en lo que respecta al casco urbano y a la baja en el medio rural. La capital le ha ganado a su entorno 775 personas en los últimos 13 años. Las variaciones que se han producido en el medio rural no son significativas, aunque destacan casos como el de San Martiño de Requeixo, que perdió más de 200 habitantes, o el de San Pedro de Maside, que descendió 100. A la hora de destacar incrementos importantes de alguna parroquia destacan casos como el de Santiago de Barbadelo, que subió 72 habitantes o San Sadurniño y San Estevo de Calvor, que suman en los dos casos más de 40 personas a sus censos de entonces. El núcleo urbano que sigue a la capital en número de habitantes corresponde a Oural, encuadrado dentro de la parroquia de Chorente. A pesar de ser el segundo núcleo del municipio en número de habitantes, perdió 30 personas en la última década, pasando de 474 a 444. Antes, más igualados El número de habitantes de la villa, 7.797, supera con una notable diferencia al del medio rural, 5.472 según las cifras actuales. En 1991 estos registros estaban más igualados al contar Sarria capital con 6.202 residentes por 6.235 que sumaban el total del resto de parroquias. La proporción que hace 13 años era casi del 50% ha pasado a ser del 70% de personas que tienen su residencia habitual en el casco urbano frente al 30% que viven en alguna de las 50 parroquias que componen el concello. Hay que tener en cuenta que una buena parte de los habitantes de la capital municipal desarrollan su trabajo en explotaciones agrícolas del Concello, pero tienen como residencia habitual la villa. Las cifras, procedentes del noménclator de 1991 y del padrón de habitantes del Concello, demuestran la tendencia de los residentes en las parroquias a trasladarse al casco urbano, lo que está ocasionando que la capitalidad municipal aumente notablemente su población, mientras que las parroquias sufren un considerable descenso. Por el momento este bajón no es preocupante en ninguna de ellas, pero podría serlo si la tendencia se mantiene en los próximos años y continúa el flujo hacia Sarria.