Los fondos para fiestas que da la comunidad de montes, en el aire al bajar el pago de Ingemarga por la cantera
22 feb 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Si la actividad relacionada con la construcción decae, la extracción de granito en la cantera que explota Ingemarga en Parga, situada en terrenos de la comunidad de montes, disminuye. Si la actividad disminuye, las ventas de la empresa bajan. Si las ventas de la empresa bajan, los ingresos de los comuneros, que son directamente proporcionales a los metros cúbicos extraídos, se reducen. En esa situación se encuentra la comunidad de montes de la localidad, como explicaba ayer el presidente, David Díaz.
En el estadillo de esta misma página se aportan algunos datos del destino de fondos recibidos por la comunidad y del descenso sufrido en los ingresos. Como la aportación para usos sociales de todo tipo se efectúa con fondos de la comunidad, que tiene en los ingresos relacionados con la cantera su principal fuente de financiación, los festejos de este año no tienen todavía asegurados donativos que antes se consideraban fijos.
Las fiestas de San Roque, que se celebran en agosto, y la Feira da cantería e dos callos, que tiene lugar en julio, recibían de la comunidad sendas aportaciones que se sitúan aproximadamente en 60.000 y en 17.000 euros. Hasta abril, dijo Díaz ayer, no se podrá concretar ninguna decisión sobre ese asunto.
El mes no es casual, dado que entonces ya se habrá recibido en la comunidad, que cobra por trimestres, la primera aportación correspondiente a este año. Díaz afirmó ayer que la del último trimestre del 2011 había arrojado unos ingresos de 32.000 euros, pero se mostró escéptico sobre un posible incremento en estos meses. Díaz incluso cuestionó que las dos mencionadas fiestas llegasen a celebrase sin los fondos de la comunidad: «Se non cubrimos o presuposto, non creo que se fagan», dijo ayer.
Una de las razones en las que fundó su postura reside en el hecho de que para ninguna de ellas se realizan peticiones en casas o negocios. Además, agregó, se trata de una costumbre implantada hace ya unos cuantos años.
Madera
La comunidad tiene, mientras tanto, más de 100 hectáreas de monte con madera de pino que podría servir para la venta, lo que supondría una fuente de ingresos. Sin embargo, los comuneros, como explicó Díaz ayer, no parecen en estos momentos interesados en la operación por el precio que rige en el mercado. La tonelada de pino se cotiza a unos 40 euros, cuando hace años, dijo Díaz, llegó a los 60.