La familia de Antonio Novo Ferreiro, militar nacido en el municipio de Guitiriz y fallecido al regresar a España de una misión en el extranjero, denuncia que el monolito colocado en su memoria en el centro de la capital del municipio, al lado de la iglesia parroquial, ha sufrido daños y desapariciones de parte de su estructura. Pero además critica la actitud del actual gobierno local en este asunto, afirmando que existe desinterés.
La viuda y los hijos del militar se dirigieron por carta al alcalde, Xosé María Teixido, para exponerle que habían muerto los dos cipreses colocados en el homenaje que se le rindió en Guitiriz casi dos años después de su muerte, aunque el mayor pesar de la familia se registró hace casi tres años, en el verano del 2010, al observar que había desaparecido el monolito colocado unos años antes.
Los familiares recibieron la noticia de que alguien lo había robado, y admiten que esa situación supuso «un hachazo» al ver que se olvidaba a un «héroe del pueblo».
Uno de los hijos del militar, Diego Novo, comentó ayer que la familia había escrito varias cartas al alcalde guitiricense sin que este, dijo, hubiese contestado a ninguna de ellas. También reconoció que la situación les creaba una sensación de vacío: antes, al pasar por ese lugar, solían depositar unas flores, y ahora, con esa carencia, ya no realizan ese gesto.
«Yakovlev»
Antonio Novo formaba parte del contingente que murió en el accidente del Yakovlev en Turquía. El avión se estrelló mientras regresaba de una misión de paz en Afganistán, y en el accidente fallecieron los 62 militares españoles que viajaban en el avión, lo que supuso una gran conmoción.