
En Marqués de Ugena hubo proyecciones en tres edificios
15 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.La historia del cine en Sarria está vinculada a seis salas de proyección, en edificios que en buena parte de los casos ya no existen, según los datos que maneja Arlindo, el cronista municipal. En la actual calle Marqués de Ugena, antigua rúa do Porvir, hubo tres.
Según esta versión, las primeras proyecciones de cine en la villa se realizaron en los salones del Casino, aprovechando el paso de ambulantes que llevaban la máquina de pueblo en pueblo. Este edificio es uno de los pocos que se mantiene en pie. Está situado frente a la iglesia de Santa María y es una casa propiedad de la familia Saco. Desde finales del siglo XIX y hasta 1989 funcionó como Casino de Sarria, una sociedad muy elitista que contaba con un máximo de 90 socios.
Ocasionalmente, según el cronista municipal, hubo proyecciones en los bajos de la casa de Acevedo, en la rúa do Porvir 17, hoy, Marqués de Ugena.
La tercera sala en funcionamiento, según Arlindo, estuvo situada en la misma calle, en los actuales números 52, 54 y 56. Se trata del Teatro-Salón, que pusieron en marcha un grupo de acaudalados sarrianos que formaron una sociedad para su construcción.
Con la llegada de la electricidad a Sarria, según la misma fuente, en el año 1915, las instalaciones sirvieron para la proyección de películas y para veladas musicales. Acabó por ser conocido popularmente como Cine-Salón o Cine Barbagelata, que hacía referencia al nombre del empresario. En el solar levantaron tres viviendas unifamiliares.
La historia de la exhibición cinematográfica de Sarria se completa con el Cine Cissa, creado en 1946 por otro grupo de sarrianos, en la misma ría do Porvir, en el número 51 de la actual Marqués de Ugena. El edifico lo proyectó el arquitecto sarriano, Nemesio López Rodríguez. Su último dueño fue Pedro Pérez Pérez, de Monforte.
En la década de los sesenta abrió sus puertas el Cine Capitol, que puso en marcha un emigrante retornado de Venezuela, Antonio Goyanes, en la calle Diego Pazos, número 75. La sala acabó convertida en cuadra para el ganado.
Entre 1959 y 1965 en el salón de actos del Postulantado Mercario, para postulantes y niños que iban al catecismo, proyectaron algunas películas entre los años 1959 y 1965.