
Según el PP, que destaca que está frente a la Diputación
05 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.La rehabilitación del edificio adquirido como sede por la sociedad urbanística de la Diputación (Suplusa), en el número 11 de San Marcos, no se ajusta a la licencia concedida por el Ayuntamiento; además, el inmueble carece de permiso de primera ocupación y, pese a ello, hay personas trabajando en su interior. Lo dice la concejala popular Isabel Devesa, que acusa al gobierno lucense de mantener en este caso una «flexibilidad que sería impensable para cualquier particular» que se encontrase en la misma situación. Por otro lado, recuerda que la Diputación construyó hace un año sin permiso municipal el cierre de los terrenos del parque móvil provincial, en Garabolos.
La concejala Devesa señala que la junta de gobierno del Ayuntamiento concedió la licencia solicitada por una sociedad limitada para la rehabilitación de la casa número 11 de San Marcos, que está catalogada, el 30 de enero de 2008. El 31 de mayo de 2012 llega al consistorio una denuncia de un particular, que expone que las obras ejecutadas en el número 11 afectan al edificio colindante. Explica que la cornisa no solo vuela sobre la vía pública, sino que lo hace también sobre el solar contiguo, ocupado por una edificación más baja que la del número 11. Por tanto, se invaden sus derechos. Quiere saber si lo ejecutado se corresponde con la licencia concedida. El permiso municipal ampliaba alturas e incluía un aprovechamiento bajo cubierta. En síntesis el edificio quedaba conformado por sótano, bajo, tres alturas y un bajo cubierta, para cuatro viviendas y tres estudios, según los datos facilitados por la concejala Isabel Devesa. La licencia fue concedida el 30 de enero de 2008.
Siempre según la misma versión, en julio de 2012, el servicio de inspección y vigilancia urbanística del Concello hizo las correspondientes comprobaciones, y en el acta señaló que la cubierta no se adapta a la licencia concedida, entre otras cosas, porque el número de ventanas del bajo cubierta no se corresponde con el aprobado; igualmente aprecia cambios en las chimeneas, en el patio de luces, en la cornisa y en los faldones de la cubierta. Hay otros informes posteriores que ratifican los citados extremos, señala Devesa.
A la vista de las circunstancias, en el Concello se incoó un expediente de infracción urbanística, y dieron trámite de audiencia. El primer propietario dijo que el edificio ya no era suyo. El 10 de diciembre de 2012 aportó el documento de compraventa, en el que se indica que ahora la propiedad corresponde a Suplusa, de la Diputación. La escritura, según señala Isabel Devesa, tiene fecha de 18 de julio de 2008.
Dada la situación, en el Ayuntamiento dejaron sin efecto el expediente en tramitación e incoan uno de reposición de le legalidad a la Diputación (27 de febrero de 2013). «Y a partir de aquí, poco se sabe», declara la citada concejala del PP. El propietario del solar colindante presentó un escrito en el pasado mes de abril para recabar información y el Ayuntamiento le respondió que se tramitaba una solicitud de licencia de obra mayor. Devesa señala: «En este momento la Diputación está a la espera de que el Concello resuelva el proyecto de legalización de las obras realizadas al margen de la licencia».
Dos velocidades
La misma edila destaca la diferencia entre la rapidez con la que se desarrollaron los trámites cuando en el Concello creían que el edificio pertenecía a un particular y la que llevan desde que se confirmó que es de Suplusa. Destaca también que se ve que dentro del inmueble hay personas trabajando, a pesar de que no está ni solicitada la licencia de primera utilización.
El grupo municipal del PP cree ver «sometimiento» del Ayuntamiento a la Diputación, algo que considera «un insulto a todos los lucenses». Aprovecha la ocasión para recordar que el organismo provincial levantó el muro de cierre de los terrenos de su parque móvil sin contar con la necesaria licencia municipal. La altura del muro, siempre según Devesa, excede la máxima fijada en el Plan Xeral de Ordenación Municipal. Dice también que en el mismo recinto se construyeron unos galpones para los que tampoco fueron solicitados por la Diputación los permisos necesarios.