El sábado por la noche y todo el día de ayer paliaron el tímido arranque marcado por la lluvia y el frío
20 jun 2016 . Actualizado a las 13:10 h.Lugo resistió un poco más la invasión de huestes romanas por Arde Lucus debido a la lluvia y el frío del estreno festivo, que este año, con motivo del 15 aniversario, arrancó el pasado jueves. Los miles de visitantes y de lucenses que decidieron salir a la calle ataviados de romanos y castrexo esperaron de forma masiva hasta la tarde noche del sábado y, especialmente, en la jornada de ayer, cuando lució por fin el esperado sol.
Además, de llenarse las calles del centro para disfrutar de la gastronomía local, en algunos casos con platos especiales para la fiesta, las zonas más concurridas de la fiesta fueron los lugares por donde transcurrieron los dos grandes desfiles, el de adultos de la tarde noche del sábado y el infantil de la mañana de ayer. Baste citar un dato: a los centenares de romanos y castrexos, de 38 asociaciones, que desfilaron el sábado, solo les faltaron alrededor de 150 metros para rodear por completo la Muralla.
Desde el ayuntamiento manifestaron ayer que se habían cumplido las expectativas y que el número de personas que acudieron a presenciar las más de 400 actividades que estaban incluidas en el programa ascendió a 600.000, cifras similar a la del pasado año. Hay que considerar que esta edición contó con una jornada más.
La alcaldesa, Lara Méndez, manifestó que «un ano máis o éxito dio Arde Lucus estivo na participación dos lucenses».
Por otra parte, la regidora destacó que, a pesar de la masiva afluencia de público, la fiesta transcurrió con total normalidad.
En lo que compete a las incidencias, lo único destacable en una jornada en la que no se produjo ningún incidente de gravedad es que muchos padres perdieron a sus niños en las citas que registraron una mayor afluencia, especialmente en el circo.
La fiesta concluyó con un acto que contó con la participación de todas las asociaciones y en el que lo más relevante fue que romanos y castrexos firmaron la paz hasta el próximo año en el que volverán a enfrentarse.