El candidato de Ciudadanos no cumple el perfil urbanita del partido y explota su faceta de paisano lucense
07 nov 2019 . Actualizado a las 13:23 h.Lo del paraguas de José Manuel Blanco, candidato de Ciudadanos por Lugo, comenzó como una anécdota pero se ha convertido en un símbolo de lo que quiere transmitir en esta campaña: «Apego á nosa terra». Blanco acudió a Madrid a la manifestación del 31 de marzo para pedir políticas a favor del rural y todo surgió con naturalidad: «Viña xente de toda España, pero comezou a chover e ninguén tiña un paraugas coma o meu, grande, feito en Galicia, e encantado acubillei a Albert Rivera». Desde ese día, como un paisano más, no se separa del paraguas: «E se saio deputado levareino a o Congreso, porque neste paraugas caben todos, un exemplo do que é Ciudadanos».
Blanco es optimista con las posibilidades de que su partido alcance el diputado por Lugo. «Sería o primeiro do Courel que chega a Madrid», explica este amante de su municipio, donde además es presidente de la asociación San Xoán, que promueve las fiestas patronales, organiza actividades de teatro y recuperó la feria de Seoane, el 12 de mayo.
Este ingeniero de Montes pertenece a la generación de nuevos políticos que se formaron en el campus de Lugo, donde aún conserva amistad con los grandes docentes de la Politécnica. «Son o único que saín da escola e que se presentou ao corpo de enxeñeiros do Estado». Trabaja desde los 22 años y desempeña las funciones de jefe provincial de la Confederación Hidrográfica, labores que ha dejado de lado al ser candidato: «Estiven ata o último día de permiso, ata as catro da mañá asinando todo e que quedara todo preparado», explica este hombre tranquilo y amante de la naturaleza.
Ayer quiso hacer una demostración de cómo funciona el paraguas de Ciudadanos, con el apoyo de la candidata a la alcaldía, Olga Louzao, quien apuntó que el paraguas de Blanco «serve para protexer e defender os dereitos dos lucenses». El candidato quiso dedicar la jornada a hablar de los pensionistas lucenses: «Un xubilado de Lugo que traballou toda a súa vida cobra 10 veces menos que os diputados do PP ou do PSOE pola provincia, que levan catro anos sen dar golpe».
Este ataque al bipartidismo es permanente en los discursos de Blanco, que fue militante de base del Partido Popular pero que ahora se ha pasado al activismo con C’s: «Síntome a gusto en Ciudadanos, porque é un partido de centro, liberal e progresista, e no caso de Lugo destaco o grupo humano». E insiste sobre lo que le animó a participar en política: «Vexo que as cousas poder cambiarse, pero ou non se quere ou non se sabe, e creo que podo aportar vontade e coñecemento, quero representar á provincia no Congreso, algo que non se estivo a facer ata agora».
Cuando se le pregunta qué puede aportar un lucense de O Courel a la política que se hace en el Congreso responde con una palabra: «Realidade», y si se le insiste en que no cumple el perfil prefigurado de un candidato de Ciudadanos, más urbanita y español, el vuelve a destacar que se trata de una formación que da cabida a todos, «menos aos corruptos», y saca elogios para Rivera: «Unha persoa cercana, natural, serea e competente. Levo 18 anos traballando e diante dun mostrador, e xa sei quen pode valer. E Rivera creo que está no momento ideal para ser un referente como o foron Suárez, Felipe ou Fraga».
José Manuel Blanco, el ingeniero de O Courel, que veranea en Barreiros, dice que no piensa en su futuro si no sale elegido, pero sí tiene claro que «os partidos fanos as persoas».
Seoane do Courel, 1979. Casado y con dos hijas.
Ingenieros d Montes por la Escola Politécnica Superior de Lugo (USC).
Funcionario del cuerpo de ingenieros de Montes del Estado. Jefe territorial de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil.
«É un paraugas sólido e fiable, que non vai deixar tirados os intereses da provincia como levan décadas facendo deputados do PP e do PSOE»