La yudoca lucense competirá en Abu Dabi, Australia y Japón con la ilusión de dar otro salto en el ránking mundial, donde es 36.ª
22 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.En plena recta final del ciclo olímpico para Tokio 2020, Sara Álvarez (Lugo, 1990) emprende una nueva gira internacional con la esperanza de dar otro buen salto en el ránking mundial y dejar encarrilada su clasificación para los próximos Juegos en la capital japonesa. La yudoca lucense se confiesa «mejor que nunca» y, por lo tanto, bien preparada para abrir más puertas en su carrera hacia un sueño.
-¿Cuál es la hoja de ruta en esta nueva gira por el mundo?
-Mañana [por hoy] partimos hacia los Emiratos Árabes Unidos para competir en el Grand Slam de Abu Dabi, que es el sábado; el domingo nos vamos a Australia para participar en el Open de Oceanía el lunes 4 de noviembre, y ya por último estaremos en Japón en el Grand Slam de Osaka, que es el penúltimo fin de semana de noviembre. Regresaremos a Lugo el día 27.
-¿Ha hecho cuentas de los kilómetros que recorrerá?
-Pues no.... Pero seguro que son muchos (risas).
-¿Cómo lleva lo de estar tanto tiempo fuera de casa?
-Estoy acostumbrada. Cuando estás en la alta competición estás expuesta a estas cosas, forman parte de la rutina, y como estás haciendo lo que realmente te gusta no lo ves como un incordio.
-¿Le queda tiempo para hacer turismo?
-Estamos centrados en la competición, pero es verdad que siempre tratamos de encontrar un día para conocer en más o menos profundidad las ciudades en las que estamos.
-En su maleta nunca falta...
-Los kimonos (risas). Siempre llevo también el libro electrónico y el iPad para los ratos libres.
-¿Se ha marcado algún objetivo?
-Espero volver de esta gira dentro de la clasificadas para Tokio 2020. Ahora mismo estoy en el puesto 36 del ránking mundial y a los Juegos Olímpicos irán las que ocupen los 22 primeras plazas en el mes de mayo.
-Eso quiere decir que deberá subir 14 puestos y luego defender el billete durante algunos meses. ¿Qué le hace ser tan optimista?
-Soy optimista porque estoy entre las mejores y sé lo que es ganar a rivales que están muy arriba en el ránking. Además, me encuentro muy bien de ánimos y de fuerzas, y casi me atravería a decir que atravieso el mejor momento de mi carrera.
-¿Sigue entrenando en tres ciudades distintas para curtirse con hombres de su peso?
-Ya no. Avilés quedaba muy lejos y además en A Coruña conseguimos reunir a mucha más gente para subir la calidad de los entrenamientos. También entreno en Lugo, claro.
-¿Qué aspectos trabaja en estos momentos?
-Estoy haciendo combates con gente más rápida.
-Estuvo cuatro años alejada de la competición. Es mucho tiempo, pero parece que le ha venido bien.
-Así es. Me ha servido para desconectar, reflexionar y volver con más fuerzas.
-El tema de los patrocinadores sigue siendo un problema, un gran inconveniente en su carrera, ¿no?
-En efecto. La Federación Española de Judo no nos financia las competiciones internacionales y el coste que debemos asumir es grande. Es verdad que tengo unos cuantos a los que les agradezco infinitamente su apoyo, pero unos cuantos más nos vendrían muy bien.