Oleada de reclamaciones en las aseguradoras de Lugo por las tormentas: «Comunidades enteras se quedaron sin luz»

André Siso Zapata
André S. Zapata LUGO / LA VOZ

LUGO

En la aseguradora Senoroeste, en Lugo, han recibido más de una veintena de reclamaciones estos días
En la aseguradora Senoroeste, en Lugo, han recibido más de una veintena de reclamaciones estos días Laura Leiras

Las inundaciones del pasado domingo y los rayos de estos días han causado decenas de expedientes en las corredurías de la ciudad, que no dan abasto

10 jun 2023 . Actualizado a las 11:11 h.

Las lluvias torrenciales del pasado domingo y las tormentas de los días siguientes que afectaron a la provincia de Lugo siguen mostrando sus efectos. Ya no en las calles, sino en las aseguradoras lucenses, muchas de las cuales se encuentran desbordadas por la cantidad de expedientes que han tenido que abrir para hacer frente a los daños provocados por el agua y los rayos.

Todo empezó en la tarde del domingo, a eso de las cinco de la tarde, cuando el cielo empezó a descargar agua y granizo como hacía tiempo que no se veía. Las calles de la ciudad e incluso edificios públicos, como el HULA, quedaron inundados. El agua colapsó la ciudad y, en otros puntos de la provincia, las riadas y el granizo llegaban casi hasta la rodilla en muchos puntos. 

Tras superar el primer episodio meteorológico adverso de la semana, las tormentas eléctricas llegaron a Lugo. El miércoles y el jueves, miles de rayos cayeron sobre Galicia, haciendo estragos en sistemas de muchas empresas y en electrodomésticos de decenas de viviendas de la ciudad amurallada.

 Más de una veintena de reclamaciones en alguna aseguradora

En varios negocios de Lugo, las reclamaciones se cuentan por decenas. Es el caso de Senoroeste, una aseguradora ubicada en la Avenida de Magoi. Allí, Lorena Lombao, una de sus empleadas, cuenta que, esta semana, recibieron «tranquilamente» más de 20 reclamaciones relacionadas con los daños del temporal. 

«El lunes fue una locura. Tuvimos que abrir muchos expedientes por los daños de las inundaciones. La gran mayoría eran servicios urgentes y había que mandar a los técnicos cuanto antes. Con otros asuntos no hay tanta prisa, pero todo lo relacionado con el agua agobia muchísimo a la gente», comenta la trabajadora.

Los mayores daños, según cuentan, se produjeron en garajes y en viviendas. Al entrar el agua en los bajos, inundó los aparcamientos interiores, anegando los sumideros. También se filtró mucha agua por los tejados. «En Montirón, una comunidad entera se quedó sin luz hasta la noche del domingo», dicen desde la aseguradora.

El temporal de lluvia del domingo pasado inundó las calles de Lugo.
El temporal de lluvia del domingo pasado inundó las calles de Lugo. Laura Leiras

Su manera de proceder tuvo que ser la más rápida posible. En la aseguradora, abren un expediente y se lo trasladan a la agencia de seguros, que envía a un perito externo para que valore los daños. «Si la reparación es urgente, hay que enviar a un técnico cuanto antes», dice Lombao.

La empleada de Senoroeste alega que «cada vez hay menos profesionales que puedan hacer estos servicios», lo que provoca la «lentitud en las reparaciones». 

De todas formas, Lombao incide en que Lugo «ha vivido crisis peores», por ejemplo, «con alguna de aquellas ciclogénesis explosivas de hace años».

Prima la reparación de los sistemas dañados

En otra correduría, Nubeiro S. L., Fina Castro, una empleada, explica que ellos tienen a una persona exclusivamente dedicada a este tipo de incidencias. «Ten decenas de intervencións pendentes de xestionar», comenta. Ella explica que «o máis importante é que o cliente non quede sen servizo por mor da treboada». Por eso, desde su aseguradora priorizaron la velocidad a la hora de reparar los daños en lugar de otros aspectos.

«Cando non conseguimos que o seguro envíe ao seu operario, instamos ao cliente a contratar a algún externo e xa logo lle pasaremos a factura ao seguro», cuentan desde Nubeiro. Estas gestiones pueden durar varios días. De hecho, todavía tienen muchos expedientes abiertos y clientes pendientes de cobro. «A pouco que teñas algún trámite que facer, como pedir unha peza dun electrodoméstico ou dun aparato que non da chegado... Alá van xa varios días de espera», concluye Castro.

Garajes y bajos comerciales, los más damnificados

Quien capeó algo mejor el temporal fue Sonia García Canedo, gerente de la aseguradora que lleva su nombre. Ella afirma que «ya gestionamos todas las incidencias derivadas de las inundaciones del domingo», aunque reconoce que, en su caso, no tuvieron «más de una decena» de reclamaciones.

«Ahora, lo que nos están empezando a llegar son las averías ocasionadas por las tormentas de estos días», dice García. «Es normal, porque, si tienes averiado el horno por un rayo, quizás no lo usas hasta un par de días después de que se estropee y no te das cuentas hasta entonces», añade.

«El domingo», dice la dueña del negocio, «lo que más tuvimos fueron garajes y bajos comerciales afectados». Según ella, «la mayoría de las averías responden a inundaciones de locales debido a la obturación de las salidas naturales del agua. En un edificio, se inundó el hueco del ascensor, y en otro local, todo el bajo», dice.

Especifica Sonia García que, legalmente, tienen 40 días para indemnizar a los afectados. Sin embargo, «si hay acuerdo con los peritos que valoran los daños, en una semana suele quedar pagado».