El Gobierno adjudica las obras por 10,9 millones y con un plazo de ejecución de 38 meses
15 feb 2024 . Actualizado a las 20:18 h.La pesadilla que sufren a diario miles de conductores que utilizan la carretera N-540 entre Lugo ciudad y Ourense aún seguirá unos años más si nadie lo remedia. El Ministerio de Transportes adjudicó el pasado lunes día 12 el contrato de obras para la rehabilitación del firme de esta carretera, entre los km 0,000 (el puente de As Saamasas de Lugo) y el 68,900 (el límite provincia con Ourense).
El importe de adjudicación asciende a 10.951.414 euros (IVA incluido) y si nadie lo cambia, el plazo de ejecución será de 38 meses, es decir, tres años y dos meses desde que se firme el contrato entre la ganadora del concurso, la gallega Construcciones Taboada y Ramos, y la Administración.
En el año 2019 se dio la orden para preparar un proyecto de reforma de la N-540 en la provincia de Lugo, que se hizo durante el 2020. En esa fase se diseñó un plan de obras para ejecutar la necesaria reforma —como recoge el proyecto— en 18 meses (año y medio). Pero el 5 de julio del pasado año, el director general de Carreteras, Juan Pedro Fernández Palomino, firmó una resolución complementaria sobre el proyecto de rehabilitación en la que se recogía un cambio en los plazos de ejecución, pasando de 18 a 38 meses.
Cömo se reparte el dinero
El citado plan de obra, que cuenta con el informe de supervisión, detalla los importes que el ministerio ejecutará cada año, comenzando con unos 200.000 euros para el presente ejercicio, y dejando el grueso del presupuesta para el 2027. «Este plan atiende a la disponibilidad presupuestaria actual y a la posible fecha de inicio de las obras», justifica la resolución firmada por el alto cargo de Carreteras.
De esta forma, en el proyecto que se licitó se estipulan los 200.000 euros para el 2024; 3,1 millones para el 2025; 3,7 millones para el 2026; y 5,4 millones para el 2027.
En la nota informativa que ayer envió el ministerio no se mencionan los plazos de ejecución. Tanto el BNG, que promovió hace unas semanas una manifestación, como el PP, ya anunciaron que llevarán a las Cortes iniciativas para intentar acelerar esta situación y que las obras sean declaradas de urgencia y, de esta forma, se acorten los plazos.
El debate de los presupuestos del Estado podía ser el espacio elegido para enmendar el cronograma oficial de las obras, o bien que se fuerce una nueva revisión de la resolución firmada el verano pasado y que cambia el criterio de las obras, basado en la disponibilidad presupuestaria.
Meses de espera
Por el momento, y mientras no se discute en las Cortes este asunto, se entra en una fase en la que se pueden presentar alegaciones a la adjudicación. Taboada y Ramos ha ganado el concurso entre las siete ofertas que se presentaron. Y aunque no fue la que pujó con el precio más bajo ni el más alto (hubo una de 8,3 millones y otra de 10), los órganos de contratación valoraron «el buen conocimiento que denotan del proyecto y de la zona y del terreno donde será ejecutada la obra y de cualquier otro condicionante externo, así como la garantía de suministros de los materiales, además del alcance propuesto por el licitador y el grado de detalle y concreción de todos y cada uno de los trabajos a realizar».
Una vez que se resuelvan todos los trámites administrativos, se tendrá que firmar el contrato y a partir de ahí se pueden iniciar los trabajos de replanteo, con lo que es difícil que las obras comiencen antes de este verano. Y a partir de ahí se empiezan a contar los 38 meses, salvo que se haga una reprogramación del contrato y se acorten los plazos.
En qué consisten las obras
Se realizará la rehabilitación estructural y superficial del firme y aquellas actividades complementarias que sean necesarias para mantener los niveles de servicio, señalan desde el ministerio, «todo ello con el objeto de mejorar la seguridad vial en dicho tramo». La rehabilitación, explican, consistirá principalmente en un fresado de parte del firme existente, seguido de un recrecimiento en varias capas entre las que se dispondrán riegos de adherencia.
En las zonas singulares, que son las más deterioradas, se realizará primeramente una demolición del paquete de firmes completo, seguida de una excavación de un metro de profundidad para, finalmente, reponer las capas de firme. Asimismo, será necesaria la regularización de los arcenes, especialmente para garantizar la seguridad de los ciclistas y motoristas. Tras esto, se procederá al repintado de marcas viales y a la disposición de los elementos de balizamiento. En cuanto a las actuaciones complementarias, se realizará la reposición de espiras y estaciones de aforo y la reposición de las juntas de dilatación de los puentes existentes en el tramo.
Una vía con graves deficiencias
El actual y bacheado firme de la N-540 fue ejecutado en el año 1996 y a lo largo del tiempo ha sufrido diversas reparaciones, sobre todo rehabilitaciones a base de lechadas bituminosas, pero han sido insuficientes para resolver los problemas que se han ido acumulando con el paso de los años. En estos momentos tiene tramos casi impracticables, llenos de baches y gravilla suelta que están provocando accidentes y pinchazos.
La senadora María José Gómez lamenta que no se considere una obra urgente
La senadora del PP y alcaldesa de Guntín, María José Gómez, calificó el anuncio del Gobierno de «electoralista e insuficiente, tendo en conta que se dilata tres anos o remate das actuacións para a mellora da vía».
La popular lamenta que con el plan de obras «todo indica que neste ano tampouco veremos grandes avances na mellora desta estrada que está totalmente intransitable; cando o que require debido ao seu mal estado son actuacións urxentes».
La regidora de Guntín insiste en reivindicar que «o Goberno garanta a seguridade dos usuarios e repare de forma inmediata a vía entre os quilómetros 16 e 17, onde se teñen producido varios accidentes, antes de que haxa que lamentar unha desgraza».
Para Gómez, el anuncio de la reforma de la N-540 en 38 meses «é un desprezo máis a Lugo por parte dos socialistas e, concretamente, do candidato á Xunta que foi o negociador da investidura de Sánchez faise evidente na partida orzamentaria do Estado para conservación e explotación de estradas que, dende o 2018, é un 207 % máis alta para Cataluña que para Galicia».
Sin conexión con el AVE
Para la senadora electa del PP el Gobierno condena a los lucenses «a convivir tres anos coa principal vía de conexión con Ourense e a alta velocidade en obras». Recuerda que esta vía nacional es la única que comunica Lugo con la ciudad de Ourense «ante a falta de avances na construción da autovía A-56», y señala que es imposible coger el AVE en Ourense «polas fochancas que rebentan as rodas, palieres, amortiguadores, lunas e faros».
Desde el PP señalan que la mejora integral de la N-540 lleva años siendo objeto de demanda tanto en el Congreso como en el Senado ante «o recorte orzamentario constante dende que o Pedro Sánchez é presidente». E indica María José Gómez que el Gobierno de Rajoy manejaba un plan para la reforma de esta nacional cuya inversión ascendía a los 20 millones, «pero o Executivo socialista encargárase de eliminalos das contas estatais».