Avanza la operación muralla en Vilalba: el Concello pide ayuda a la Xunta para la recuperación de la cerca medieval
LUGO
El Concello aspira a contar con fondos que permitan lograr más datos para dar una protección legal a los restos
18 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El Concello de Vilalba sigue adelante con su plan de recuperar la muralla medieval, aunque con algún matiz nuevo. La intención municipal no apunta a levantar todo el terreno en el que se supone que hay restos de la antigua cerca, sino que se centra en los lugares donde esa presencia es aún visible. El último paso ha sido el envío de documentación a la Xunta para que la administración autonómica colabore. Hace semanas, cuando las intenciones empezaban a perfilarse, el Concello preveía dirigirse a la Diputación para conseguir ayuda.
En la memoria, entre otra documentación, figuran dos propuestas económicas sobre el coste de una intervención. Una, considerada la más básica, tendría un coste de unos 8.000 euros; la otra, con una actuación más amplia, supondría prácticamente el doble.
La concejala de Comercio, Promoción da Lingua e Turismo, María Xosé Fernández Pardo, explicó este viernes que el resultado de la intervención, reconociendo que sería más amplía si se contase con la subvención mayor, era claro. El Concello quiere que los restos que aún se conservan al aire libre estén bien conservados, porque así se considera más fundada otra aspiración, lograr que se declaren Bien de Interés Cultural (BIC) y posean una mayor protección legal.
Hasta ahora se han dado ya varios pasos. En primer lugar, la concejala Fernández Pardo, del grupo de Vilalba Aberta, contactó con arqueólogos que se desplazaron a Vilalba y realizaron una primera inspección de los restos que aún se pueden ver, situados en la confluencia de la rúa do Sol y de la rúa da Pedra. En segundo, se dirigió a los dueños del terreno, a quienes expuso los planes municipales y en quienes encontró una actitud muy positiva, que agradeció.
Como explicó est viernes la concejala, los trabajos se realizarán solo en esa parcela, ya que una actuación más amplia obligaría a levantar una superficie mayor, con más coste. Logrando ese propósito, no solo se podrá tramitar que la muralla medieval —de la que hay alguna mención en el libro Villalba en el siglo XIX, de Antonio Peña Novo— cuente con una protección legal sino que será más fácil colocar alguna señalización que divulgue los restos y el trazado de hace siglos. También se espera que los arqueólogos implicados en el proyecto acudan a Vilalba para ofrecer alguna charla sobre este asunto y expliquen a los vecinos cuestiones del patrimonio histórico local.