La Audiencia de Lugo condena a una mujer a cinco años de prisión por estafa y daños morales a una anciana en Vilalba
LUGO
Logró conseguir la confianza de la víctima, a la que le quitó los más de 30.000 euros que tenía en su cuenta bancaria
31 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.La sección segunda de la Audiencia Provincial de Lugo ha condenado a cinco años de cárcel a una mujer por estafar y atentar contra la integridad de una anciana. Además le ha impuesto una multa de nueve meses, a razón de seis euros diarios, y el deber de indemnizar a la anciana afectada con 33.630 euros, que fue lo que le habían quitado. También ha condenado a otra mujer como cómplice, decretando para ella tres meses de prisión. Las dos, por otro lado, deberán indemnizar conjuntamente a la mujer con 6.000 euros por los daños morales causados.
En la sentencia se recoge que una de las mujeres, «mediante engaño y con el ánimo de obtener un lucro ilícito», inició, en la primavera del 2020, un contacto asiduo con una mujer mayor que ella, afectada entonces de pérdida de sus facultades y necesitada de ayuda opara vestirse o comer. Para apoderarse de sus ahorros, fue ganándose su confianza, y para ello usó un taxi, que atendía con su pareja, para llevarla al médico o al banco. Así supo qué saldo tenía en la cuenta y accedió a la cartilla.
Durante una estancia de la anciana en el HULA, la acompañó y la convenció de que se fuese a vivir al mismo pueblo que ella, en donde le buscaría un piso y la cuidaría. En el 2022 firmó la renuncia a la asistencia social en el municipio donde vivía. La anciana fue trasladada a una vivienda de Vilalba, en donde la otra mujer ahora condenada le llevaría periódicamente comida y le bajaría la basura; pero ni la limpiaban ni la llevaban al médico.
Logró pedir ayuda
La mujer era usuaria del servicio de teleasistencia de la Cruz Roja desde antes de conocer a la mujer que la engañó. Entre enero y marzo del 2023 el dispositivo fue desconectado nueve veces, pero en abril la usuaria lo empleó para pedir ayuda. Así se pudo encontrar el piso donde estaba, y el médico que la atendió apreció «posible situación de desamparo por emergencia social». Por un auto del Juzgado de Instrucción número 1 de Vilalba la mujer, que se quedó si ahorros y en precaria situación económica, fue internada en la Residencia de Persoas Maiores de la capital chairega.
El dinero fue retirado de la cuenta bancaria de la anciana en varias operaciones. Las primeras se realizaron, en cajeros de Muimenta y de Castro de Ribeiras de Lea, mientras la víctima aún residía en su domicilios: en trece veces se retiraron 11.000 euros, con cuantías que oscilaron entre los 400 y los 1.000 euros. Luego, cuando la anciana ya había sido convencida de que cambiase de residencia, se hicieron 52 operaciones, con las que se retiraron los 22.630 euros que quedaban en la cartilla. La sentencia no es firme, por lo que cabe recurso de apelación.