«¿Qué hacéis ahí?»: los gritos de un vecino de Guitiriz que ahuyentaron de noche a unos ladrones
LUGO
Los ladridos de los perros despertaron a un guitiricense que vio que se intentaba entrar en un edificio próximo a su casa
19 ago 2024 . Actualizado a las 18:17 h.Un vecino de Guitiriz logró frustrar un robo en la madrugada de este lunes. Vio que tres personas intentaban entrar en un edificio en construcción, ya casi acabado, cerca de su casa; primero les silbó y luego les gritó 'Eh, ¿qué hacéis ahí?'. Los tres hombres cesaron en su intento de acceder al edificio y se metieron en un coche que estaba aparcado cerca. El vehículo, con las luces apagadas, salió marcha atrás a bastante velocidad, llegó a la travesía de la N-6 y desapareció de la zona. Siguió por la carretera, sin haber encendido las luces, en sentido A Coruña.
Serían alrededor de las dos y media de la madrugada de este lunes cuando este vecino, que estaba acostado pero aún no dormía profundamente, oyó ladrar a sus tres perros. Él ya intuyó que algo podía pasar y se asomó a la ventana. Entonces vio que había tres personas merodeando por la zona, pero se metieron en el coche y se fueron. En esa primera huida el coche circuló marcha adelante y con las luces encendidas, aunque tras haber intentado meterse marcha atrás por un camino.
Aproximadamente una media hora después, los tres perros ladraron de nuevo. El vecino que había visto antes a las tres personas se puso otra vez en alerta. «Ou vén xente da festa de Parga ou pasa algo», pensó. Parga celebra estos días los festejos de San Roque, que terminan este lunes, pero los ladridos no tenían que ver con noctámbulos amantes de la diversión. Volvió a ver a los tres hombres, que, como dijo horas después, medían entre un metro setenta y un metro ochenta y le parecieron no muy mayores.
Sus silbidos y sus voces lograron ahuyentarlos, y esta mañana averiguó que se había intentado forzar la puerta de un edificio con una pata de cabra, aunque su aparición sirvió para que el capítulo de sucesos fuese más breve y los asaltantes se marchasen de vacío.