Gracia Alonso, jugadora del Estudiantes: «Nosotras tenemos la verdadera medalla de oro en la repercusión»
LUGO
La subcampeona olímpica 3x3, ala-pívot del Estudiantes, visita este sábado al Ensino
03 ene 2025 . Actualizado a las 19:42 h.Gracia Alonso de Armiño Riaño (Bilbao, 1992) juega su segunda temporada en el Estudiantes, octavo clasificado, y que visita al Ensino Lugo en el Pazo este sábado (19.00 horas, Canal FEB TV y La Liga Plus) en la jornada que cierra la primera vuelta. Además, la ala-pívot vasca ganó la Copa en el 2023 con el Zaragoza, así como es la vigente subcampeona olímpica 3x3 en París 2024 y campeona de Europa apenas veinte días después. Anotó la heroica canasta para clasificar a España para los Juegos Olímpicos. Una jugadora inteligentísima tácticamente, muy eficaz en el rebote, con visión de juego, capacidad para penetrar, tiro exterior y excelente defensora. Las estudiantiles se juegan la clasificación para la Copa. El Ensino busca la quinta victoria.
—¿Cómo viven desde el prisma de las jugadoras esta mezcla de navidades y calendario de Liga?
—Un poco apretado todo porque intentas tener un poco de calidad de vida y juntarte con tu familia estos días y el hecho de que no pare la liga tiene su repercusión. Un par de días descansamos, que eran necesarios, entre semana. Pero bien. No parar puede que dé también un poco de visibilidad a la liga y que haya partidos disponibles para el público también puede que haga que crezca. Entonces, es un poco un doble filo.
—¿En qué momento de forma está su Estudiantes?
—Estamos bastante bien, estamos empezando a encontrar un poco una identidad algo más definida. Estamos sólidas en defensa, que es uno de los pilares fundamentales de lo que es la personalidad de Estudiantes, y contentas con Nacho (Martínez), el nuevo entrenador. También hemos tenido algún que otro vaivén de jugadoras, pues un poco volver a arrancar con los conceptos básicos y tratar de adecuarlas y adaptarlas lo mejor posible para estar preparadas para ayudarnos desde el día uno. Que con todo lo que nos ha pasado durante el inicio de la primera vuelta que todavía tengamos opciones de meternos en Copa de la Reina dice mucho de este equipo y de este Movistar Estudiantes como club.
—¿Qué cambios ha percibido entre Nacho Martínez y David Gallego, el anterior primer entrenador?
—Entendiendo un poco de dónde venía David, del sitio que estaba él a nivel personal, profesional y emocional. Quizás ahora con Nacho tenemos unas directrices más claras, más concisas y tenemos menos sesiones de vídeo, menos charlas. Entonces, el hecho de que queden las cosas algo más claras nos está ayudando también para nosotras poder centrarnos en la pista. Está transmitiendo bastante seguridad al equipo y, sobre todo, nos deja un poco de cancha para nosotras también poder tomar decisiones en pista.
—¿Qué le pide a usted en el aspecto táctico de forma individual?
—Específicamente nada, creo que a ninguna. Todas fluimos y es cuando sale el baloncesto que llevamos dentro, el que te puedan permitir un espacio en el que puedas cometer errores sin ser penalizados in situ, que te puedas sentir siendo el baloncesto como es un deporte de error y de porcentajes. El sentirnos con cierta libertad y con minutos en cancha también ayuda a que te sueltes un poco y empiezas a encontrar diferentes ventajas en todos los ámbitos, ya sea corriendo al contraataque, reboteando bien, ayudando en defensa, encontrando los espacios y sabiendo encontrar y potenciar las virtudes de cada jugadora, de cada compañera.
—Usted es una jugadora muy completa tanto al 5x5 como al 3x3. ¿Esa base del 3x3 le ha ayudado mucho en el 5x5?
—Muchas gracias. Sí, la verdad es que sí. Es verdad que igual en el 3x3 se te ve más porque somos menos jugadoras y tienes que estar en todos los partidos, no hay un partido que te puedas borrar porque el equipo ya cojea con tres. Entonces, a la hora de estar en pista, de la presencia, después de los torneos que hemos vivido este verano y el peso que han tenido también he ganado en confianza y en autoestima como jugadora. Estoy muy contenta y muy satisfecha, se está dando bien, ahora mismo estamos ejecutando bien ahora los partidos y estamos sumando victorias.
«Siempre he considerado al Ensino como un equipo súper competidor»
—¿Qué opina del Ensino esta temporada?
—Yo siempre he considerado al Ensino como un equipo, un club súper competidor que siempre hace muy buenas plantillas. Quizás este año no han sabido encajar muy bien las piezas, se les ha visto competir a los grandes y luego borrarse completamente contra equipos de abajo. Igual una inconsistencia entre jornadas, pero eso no quiere decir nada porque tienen un equipazo y cuando se ponen las pilas y quieren jugar son un equipo muy difícil de batir. Nosotras vamos muy mentalizadas de que nos vamos a encontrar una muy buena batalla, que va a ser un partido divertido, competido y vamos a ir a hacer nuestra mejor versión.
—Usted fue compañera de Bea Sánchez en el Araski. ¿Qué recuerda y qué destaca de ella?
—Una jugadora que trabaja un montón en el día a día y es muy buena a nivel de conceptos básicos. Es una jugadora que le caracteriza la garra, la defensa, es una jugadora que siempre aporta, no solo a nivel anotador. Tengo muy buenos recuerdos de ella.
—¿Cómo analiza el verano 3x3 de Ceci Muhate? Incluso fue MVP del Women´s Series de Bakú.
—(Sonríe) Sí, muy bien. A ella se le ve que está ganando en confianza y que suma en galones. Al final, es lo que te da el 3x3 también, esa soltura y el poder hacerse grande en la pintura también. Para ella también significa un crecimiento bastante grande.
—¿Le ha cambiado mucho la vida la plata olímpica?
—Te diría que no. Soy muy sencilla.
—Me refiero más a la hora de ser conocida, a la hora de ir a otros pabellones, por la calle, a nivel mediático también.
—Te diría que sí. Hay mucha gente que me para a mí y a Juana (Camilión) también porque, claro, vamos como un pack en el Estudiantes (se ríe). Mucha gente nos transmite esa emoción que han vivido con nosotras, que les hemos podido transmitir. Al final es lo que nos llevamos también. Nosotras tenemos la verdadera medalla de oro en la repercusión que ha tenido. Yo, como enfermera, me encanta ver ese espíritu que se puede transmitir y que puede incluso hasta fomentar que personas que igual no practican deporte, pues con el chute de energía y de adrenalina que han experimentado con el 3x3 que les anime ya sea a caminar, a hacerse unas caminatas, a salir al monte, a coger la bici, a nadar, simplemente a mantenerse activos y fomentar un poco el cardio, subir un poco de pulsaciones, que es fundamental también para la salud. Yo estoy encantada.
—Usted es enfermera. ¿Cómo lo compatibilizó todo en su momento?
—(Sonríe) Ahora mismo no se puede compatibilizar, sobre todo con la enfermería. La enfermería estaba aparcada desde hace un par de veranos, que me dedico específicamente al baloncesto y, sobre todo, al 3x3. Te diría que está llegando un punto en el que va a ser incompatible el 5x5 con el 3x3. Tanto España como Federación o las federaciones autonómicas puede que incluso se puedan separar. El hecho de que hayamos conseguido una medalla olímpica en una disciplina que no es la nuestra, que no es profesional en España eso dice mucho del talento femenino nacional que tenemos. Se están empezando a solapar tanto el final y el inicio de las temporadas 3x3 con los finales de temporada 5x5. Poco a poco yo creo que vamos a ir viendo una transformación y una profesionalización del 3x3, que sería lo ideal, porque también es muy exigente a nivel físico estar toda la temporada de septiembre a abril en el 5x5 y directamente meterte en el 3x3 todo el verano con la exigencia que requiere. Al final, parece que la única forma de parar es petando, que tu cuerpo te diga "hasta aquí llego". Yo, por ejemplo, es mi tercer año consecutivo sin descansar. Entonces, hay ciertas molestias que tienes que lidiar con ellas. A ver si se definen un poco las situaciones y apostar por una cosa o por la otra.
—¿Usted tendría clara la decisión o no?
—Bueno, no está nada decidido. Como jugadora percibo que la única solución es estar aquí solapando porque obviamente que la selección española 3x3 te seleccione habiendo estado parada, ¿de qué equipo vienes?. Claro, es que entiendo que ellos se tienen que respaldar en sus beneficios, pero es un poco insostenible. Entonces, habrá que tomar decisiones, te digo de cara a dentro de unos cuantos años. Yo de momento me encuentro bien, estoy muy agradecida al físico que tengo, a la genética, a todo el cuerpo técnico de Movistar Estudiantes, que están súper encima siempre, médicos, fisios, preparadores físicos que trabajan en conjunto para que salgamos del paso con nuestras molestias y que podamos continuar jugando a cierto nivel y que cuando ves los resultados y que te empiezas a encontrar mejor, pues ya sea reducción de cargas en los entrenamientos o sesiones de magnetoterapia o de alguna otra cosa, de alguna otra técnica menos invasiva de fisioterapia, ves resultados y ves que esas molestias se están yendo a pesar de que no has parado. Eso es también muy satisfactorio y que puedas ejercer tu función al 100 % porque estar en pista con dolor o con molestias realmente no estás al 100 % y, quieras o no, el cuerpo tiende a protegerse. Entonces, no haces un desplazamiento extra, igual no haces el esfuerzo que te caracteriza porque inconscientemente te estás protegiendo eso que te duele. Para estar al 100 % hay que estar bien cuidadas. Estoy muy agradecida al club en el que estoy, que nos cuidan muy bien y a ver si se soluciona un poco la situación o seguimos en el lío a caballito de uno a otro.
—¿Cómo fue a nivel mental asegurarse medalla y jugar poco después la final olímpica? Es habitual en el 3x3, pero no con este formato de todos contra todos en la fase de grupo.
—(Se ríe). ¡Ya te digo! ¡Qué pasada! ¡Es todo tan rápido que no te da tiempo a registrarlo! Yo creo que cuantas más vueltas le das más nerviosa te pones o distraes tu mente con cuestiones que no son relevantes en el momento. Entonces, yo creo que simplemente nos concentramos en lo que teníamos que hacer, en lo que nos tocaba y olvidarte que estás jugando por medalla y luchar hasta el final por ganar el partido. El formato de los Juegos Olímpicos no se había hecho nunca antes en ningún torneo al que estábamos acostumbradas. Para nosotras fue una maratón el estar esperando todo un día para jugar diez minutos a las ocho de la tarde, por ejemplo, y luego al día siguiente otro partido de diez minutos. Estábamos acostumbradas a jugar tres o cuatro partidos en dos o tres días para resolver los torneos. El hecho de que también se dilatara todo en el tiempo en una semana de competición teníamos muy claro que el verdadero ganador era el que sobreviviera el domingo, que era el único día libre que teníamos antes de la semifinal del lunes, que todas estuviéramos saludables porque se te cae una jugadora a medio camino y con tres es muy difícil. Eso te lastra mucho. Teníamos muy claro que íbamos a ir partido a partido. Entiendo que cómo se dio el torneo tuvimos mucha suerte, ya no sé si suerte o nos lo merecíamos después de tanta lucha en aquel cuádruple empate que se dio, y nos metimos como cabezas de serie directas en semifinales. Jugar el play-in también hubiera sido una carga más. Lo luchamos y hasta nos divertimos en la pista. No se podía dar mejor.
—Jugó en los Juegos Olímpicos contra Azerbaiyán, donde juega la alera del Ensino Alexy Mollenhauer, con la que coincidió también un par de semanas la temporada pasada en el Estudiantes. ¿Qué destaca de ella?
—Sí. Fueron un par de semanas. Es una anotadora, tiene muy buen tiro, toma muy buenas decisiones con la bola. Espero que el sábado no se le dé el día (se ríe). Es una pieza clave del Ensino esta temporada. Si empiezan a remontar sería una jugadora fundamental.
—¿Cómo recuerda la canasta de espaldas para clasificaros para los Juegos Olímpicos contra Canadá? Yo la vi como bastante natural porque usted es especialista en el aro pasado.
—(Sonríe y se ríe) Sí, me gusta más apoyarme en el tablero, que está infravalorado (se ríe) y es una parte fundamental de la pista. Lo considero el sexto jugador, el cuarto en el 3x3. Cada vez que veo las imágenes otra vez se me pone la piel de gallina. Es un gesto puramente intuitivo, de instinto. Me sorprende más el rebote que le rebaño a una de las gemelas Plouffe (Katherine) por cómo llegué. ¡Lo tenía ella casi entre las dos manos! No sé cómo me tiré el rebote para un lado. Fue la intuición de saber el tiempo que queda, el espacio que tienes. Quizás de haberme girado a hacer un tiro tradicional me hubiera quedado sin tiempo y nos hubiéramos ido a la prórroga. Canadá ya iba como en un momento ascendente, nos había remontado y no sé qué hubiera pasado. Fue algo fortuito. No lo voy a negar porque son tiros que metes uno entre un millón. No lo he vuelto a intentar. Es una representación de lo que significa el baloncesto para mí, la relación que tengo yo con el baloncesto. Quizás no tenga una técnica o un dribbling súper mecanizado que lo practique todos los días, ¿pero quién practica ese tiro? Es impracticable. Entonces, es la relación que tengo yo con el baloncesto, de pura intuición, de tomar decisiones en el momento, de vivirlo a flor de piel. Esa canasta me ha regalado todo lo que vino después. Para mí es un regalo que me ha hecho el baloncesto.
—¿Nota usted que hay mayor afición al 3x3 en España después de los Juegos Olímpicos o le preocupa como a mí que sean deportes que solo lo siga cierta gente dos semanas y media cada cuatro años?
—(Sonríe). Ya. Yo creo que sí. Ha tenido mucha repercusión, se ha dado a conocer. Ahora no se puede ver porque no hay ligas, no hay competición. Si se cubriera en la radio, en los medios, en la tele, si colaboráramos todos para que se pudieran retransmitir estos torneos o los Women´s Series a los que vayamos, que podamos generar una afición a esta disciplina y que se empiece a creer que realmente se puede apostar por formación, por equipos 3x3, que haya chavales, que haya campus, que haya equipos ACB con secciones 3x3. Yo empezaría todo por ahí porque en el femenino es lo que hemos conseguido, pero con jugadoras 5x5. En chicos sí que ya está profesionalizado, ellos mismos deciden jugar 3x3 y juegan todo el año los World Tour o los Challengers.
—Sí, como el gallego Carlos Martínez.
—Sí, está jugando en un equipo de Suiza, cobrando bien, teniendo un sueldo y estando bien cuidados. Falta ese empuje quizás en el femenino, pero se puede ir cocinando una buena afición entre lo que hacemos en verano.
—Usted se parece en el juego a otro jugador 3x3 y 5x5, que es Unai Mendikote, jugador del Club Ourense Baloncesto.
—(Se ríe) Yo creo que es un poco el gen vasco, la garra, la lucha, el estar no molestando, sino estorbando, haciendo que se retrase el ataque del equipo rival, generando dudas en la jugadora que bota. Quizás no solo en el País Vasco. Atacamos desde la defensa. Yo no me voy a quedar parada para que me hagas un crossover. Yo te estoy mirando y te amago que voy a un lado, entonces el que lleva la pelota ya no sabe a dónde ir. Me acabo de girar a la derecha, pero va a la izquierda, pero luego... Es un continuo movimiento de pies, estar activa, estorbar, correr, correr mucho, hacer un juego vistoso, dinámico, que todo el mundo aporte, que no sea solo un jugador o jugadora y que hayamos ganado porque tenemos una estrella en el equipo. Me gusta la Copa de la Reina que ganamos en Zaragoza porque fue un triunfo colectivo y lo sentimos así, todo el mundo aportó, nadie se bajó del barco. Teníamos muy buenas jugadoras, pero aún así las que éramos estábamos en rotación, estábamos siempre al pie del cañón desde la defensa. Con Mendikote también tengo muy buena relación y nos familiarizamos con ese concepto.
—¿Cómo recuerda el último cuarto de Helena Oma, ex Ensino, precisamente en la final que ganan ustedes de la Copa con el Zaragoza?
—Espectacular. Hizo un muy buen papel al final. Que tenga esos tiros y que esté acertada. Ésa es la clave. Estábamos todas muy enchufadas en el partido, no solo a nivel anotador. ¡Es que aportábamos en todas las facetas! Ella tuvo esa muñeca, esa predisposición también para estar preparada a nivel mental para hacer esos tiros porque no son nada fáciles y tienen cierta presión y, si no estás a la altura, aunque tires muy bien o tengas una mecánica muy buena, te pueden ganar las dudas, el temor, la presión de la competición. Estuvo muy seria y ejecutó como una campeona. Solo quiero añadir que no va a haber piedad, vamos a ir a por todas en Lugo. Invito a todos los que estén alrededor que vengan a vernos, a disfrutar del baloncesto con nosotras y a animar mucho.