Problemas de humedad en la cubierta del auditorio de Vilalba: «A situación é peor do que se pensaba»

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS LUGO / LA VOZ

LUGO

En el auditorio se desarrolla una amplia actividad cultural, aunque el edificio arrastra problemas
En el auditorio se desarrolla una amplia actividad cultural, aunque el edificio arrastra problemas ALBERTO LÓPEZ

El Concello reconoce que hará falta apoyo de otras administraciones para reparar el edificio

03 feb 2025 . Actualizado a las 20:35 h.

El auditorio de Vilalba no termina de asentarse. Los problemas que aparecieron en la fachada a principios del año pasado y que obligaron a retirar losas de la fachada siguen pendientes de arreglo, pero no son los únicos. En la cubierta hay deficiencias causadas por la humedad, como reconoció este miércoles Modesto Renda, primer teniente de alcalde y responsable de área de Urbanismo: «A situación é peor do que se pensaba», dijo este miércoles el cabeza visible de Vilalba Aberta en el consistorio.

Los problemas causados por la humedad y la restauración del exterior, con la colocación de losas en los lugares donde se desprendieron, entrañan un coste que no está concretado pero del que sí se sabe algo: las arcas municipales son insuficientes para afrontar esa operación y hará falta colaboración de otras instituciones. Renda incluso admitió que «nin nos mellores momentos da economía local» se habrían podido realizar esos trabajos en solitario. En algunos años del bum de la construcción, en la primera década de este siglo, los ingresos por el impuesto de construcción estuvieron en Vilalba por encima del medio millón de euros, aunque esa situación fue efímera.

En las primeras semanas del año pasado, de la fachada del auditorio se retiraron unas 20 losas de pizarra. La medida se decidió por el riesgo de caída, antes de que la situación causase males mayores. Pronto empezaron las gestiones para reponerlas, si bien Tamara Rodríguez, entonces concejala de Cultura, explicó que la empresa con la que se había contactado tenía una carga de trabajo que impedía poner fechas a la operación. Gestiones posteriores, con las que se intentó hallar alguna empresa, tampoco se tradujeron en resultados.

Por otro lado, los problemas en la cubierta no son nuevos. En el otoño del 2014 se adjudicaron, en 250.000 euros, trabajos de mejora que incluyeron la colocación de bandejas de acero y de gárgolas y la instalación de un nuevo sistema de ventilación. La Xunta aportó el cien por cien del presupuesto tras un convenio firmado con el Concello, que se comprometió a tramitar los permisos. Esos problemas eran especialmente graves en la parte del edificio que ocupa el conservatorio y motivaron protestas de padres de alumnos.