«El hacha es un hallazgo impresionante»

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS VILALBA / LA VOZ

CASTRO DE REI

PALACIOS

Miguel López, arqueólogo que trabaja en Viladonga, destaca el valor de la pieza hallada en días pasados

22 ene 2024 . Actualizado a las 19:37 h.

El castro de Viladonga (Castro de Rei) resulta interesante por lo que muestra y por lo que oculta. Por un lado, las campañas impulsadas en las últimas décadas han permitido que parte del yacimiento pueda ser visitado y además haya nutrido buena parte de las salas del museo, próximo al yacimiento. Por otro, cada campaña de trabajos ha servido para enriquecer el conocimiento del pasado castreño, y la que está ahora en marcha no es una excepción.

Como publicó ayer este periódico, en los actuales trabajos de consolidación y de investigación apareció un objeto, una hacha de bronce, cuyo origen se sitúa en torno al siglo III antes de Cristo. La pieza fue hallada por Miguel López, arqueólogo de la firma Terra Arqueos, encargada de esta campaña. «El hacha ha sido todo un hallazgo, un hallazgo impresionante», decía ayer.

La pieza apareció en la parte baja del aljibe encontrado en el 2018. Esa construcción está situada en el nordeste de la croa, y su hallazgo supuso un gran descubrimiento: no solo se trataba de algo novedoso en las estructuras del castro, sino que confirmaba, con restos de viviendas que también aparecieron entonces, una ocupación anterior al período romano.

El hacha que encontró López estaba en la parte inferior del aljibe, que ahora se está consolidando. La pieza sobresale por la variada decoración, pues tiene un toro o una vaca, un cerdo o un jabalí y un carnero o una oveja. Se supone que se empleaba en ritos relacionados con la tierra. El estado de conservación es bueno, aunque un poco peor, explicó ayer el arqueólogo, en la parte posterior.

El hallazgo ratifica que el castro estuvo habitado antes de los romanos, pero además presenta un valor superior al de piezas similares. Por un lado, la decoración es más rica; por otro, está claro, a diferencia de otras piezas. dónde fue hallada, lo que facilita más información.

A la campaña actual le quedan por delante varias semanas. Aunque la función de consolidación y de investigación es la prioridad, la posibilidad de más hallazgos no se descarta. «Estoy seguro de que había algún aljibe más en el castro», decía ayer López, convencido de que se usó en dos etapas: tras la primera se restauró, y se empleó de nuevo una vez construida la muralla.

El trabajo de los últimos das también ha sido fructífero en hallazgos, ya que apareció una fíbula de bronce y de hierro, seguramente de igual antigüedad que el hacha. También fue hallada dentro del aljibe, a pocos metros del hacha. Además, como en anteriores campañas, se han encontrado restos de cerámica.

«Se puede hablar claramente de una cultura castreña», dice Elena Varela

El hallazgo del aljibe, del hacha y de la fíbula sirve para demostrar con claridad que el castro de Viladonga estuvo habitado ampliamente antes de la época romana. Para la directora del Museo de Viladonga, Elena Varela, no es una novedad. Ya hace varias décadas, con algunos trabajos de investigación, se pudo comprobar que el castro había estado «muy romanizado». El balance de estas últimas campañas contribuye a fortalecer esa impresión: «Se puede hablar claramente de cultura prerromana, castreña», afirmó ayer.

Ese legado prerromano, por otro lado, se ha visto enriquecido este año con la aparición de restos de viviendas de esa época, que fueron descubiertos durante los trabajos de consolidación del aljibe y de construcciones situadas cerca.

El Museo, lugar al que irán a parar los objetos aparecidos

El Museo de Viladonga, creado en los años ochenta del siglo pasado, muestra en sus salas diversas piezas halladas en el castro. Una de las salas está dedicada al mundo prerromano, y ese es el espacio reservado para ubicar y enseñar al público esas piezas. Los hallazgos serán entregados al final de la campaña, junto con el informe que recoja los trabajos realizados en estas semanas. La campaña está promovida por la Consellería de Cultura.