Una tarjeta de móvil y una factura sin pagar implican a la concejala de Láncara denunciada por usurpar la identidad de un banco

Teniente de alcalde del Concello de Láncara, la socialista Begoña López renunció a su cargo el pasado 13 de enero alegando motivos personales. Pasó a ser una concejala más. Apenas dos semanas después, se desveló que esta mujer está siendo investigada en el Juzgado de Sarria por una presunta estafa, falsificación documental y usurpación de identidad a una empleada de banca.

Fueron un constructor y esa trabajadora quienes interpusieron una denuncia el pasado diciembre. Este proceso judicial llegó al Concello porque la denunciada pudo haber utilizado un móvil del Ayuntamiento de Láncara para cometer alguno de los delitos por los que está siendo investigada. Desvelado el caso, Begoña López dejó el grupo socialista, pero no dimitió, y mantiene su acta hasta que se resuelva la investigación.

Begoña López era la segunda teniente de alcalde del socialista Darío Piñeiro, que gobierna en este pequeño ayuntamiento de Lugo desde el 2015 (ahora con mayoría absoluta). La concejala había encargado unas obras de ampliación de la casa de sus padres y la restauración de una vivienda antigua, que comenzaron en octubre. El constructor empezó las obras «sen pedir cartos por adiantado», relata él mismo. Pero «cando tiña bastante feito, o pai da concelleira pediume a factura». Esta primera factura se cifraba en 39.272 euros: «Paseilla, e como vin que tardaba moito en ingresar, díxenllo. Culparon ao banco e fixéronme outra coa que me adxuntaron un xustificante, así que quedei tranquilo». Sin embargo, pasaron los días y el dinero no entraba en la cuenta del constructor. «Esa transferencia nunca foi feita e o xustificante estaba falsificado», denuncia.

Después, el empresario recibió un wasap de un número cuya imagen de perfil era el logotipo de un banco. En él, una supuesta trabajadora le explicaba que la transferencia de Begoña López se había realizado, pero que se había registrado un error en el banco. «Cando o recibín fun ata a sucursal, onde a directora me explicou que non tiña constancia dese número nin do que decía». Ese día, recibió una llamada del mismo número en la que la empleada le insistía en que «o cliente [por Begoña] era un bo usuario con cartos para pagar, e que houbera un erro informático que se solucionaría nos vindeiros días».

Pero esa transferencia nunca llegó al constructor. «A chamada non era dunha traballadora, era de Begoña, recoñecín perfectamente a súa voz porque era unha persoa de confianza», defendió. Entonces, el empresario interpuso una denuncia en el juzgado de Sarria contra la concejala, el día 23 de diciembre del 2021, por una presunta estafa y por falsedad documental.

Desde que el constructor había hecho la primera factura hasta el día de la denuncia, las obras continuaron. Posteriormente, acudió un perito a la vivienda para determinar los gastos de todo lo construido; 62.000 euros en total. A la vez, la directora de la sucursal afectada también denunció los hechos alertando de un posible delito de usurpación de identidad ante la Guardia Civil, aunque todavía no se ha personado como acusación. El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 1 de Sarria inició una investigación con Begoña López como principal protagonista. Ya fue citada ante la jueza, pero se acogió a su derecho a no declarar.

Otra transferencia falsa que no se denunció

El justificante de la transferencia de 39.000 euros que, como denunció el constructor, era falsa, procedía de otra deuda previa de la concejala. Según la defensa del empresario, Begoña López había comprado un tractor por un importe de 10.000 euros que tenía que pagar a través de una transferencia. La edil solo envió al dueño del tractor 2 euros. Con el justificante de esta transacción real, falsificó presuntamente otras dos transferencias, la de los 10.000 euros del vehículo y la de los 39.000 de las obras. La defensa del constructor se percató de esto porque los tres papeles tenían el mismo número de orden. El propietario del tractor no denunció los hechos porque la concejala llevó el vehículo a un taller por una avería y ya no se no devolvieron porque no lo había pagado.

Implicación del móvil del Concello

Los mensajes y la llamada que recibió el constructor se realizaron desde un teléfono móvil que el Concello había contratado en el 2016. Esta línea fue promovida para que los vecinos pudieran trasladar sus quejas y sugerencias. La responsable, como ella misma confirmó, era Begoña López: «O móbil custodiábao eu. Tiña dúas tarxetas SIM, unha persoal e outra co número de atención aos veciños, que se extraviou».

La edila relató que la tarjeta SIM de ese móvil «se extravió», aunque no concretó el día. Hace unas semanas, en la foto de perfil de WhatsApp de ese número, apareció el logotipo de la entidad bancaria a la que presuntamente se le usurpó la identidad. Begoña López le contó al alcalde que la tarjeta había desaparecido y, pese a que era su responsabilidad, el regidor Darío Piñeiro fue quien acudió a la Guardia Civil el 11 de enero del 2022 para interponer una denuncia por su extravío. Dos días después, el 13, Begoña López renunció a la tenencia de alcaldía por motivos personales y pasó a ocupar un par de funciones como concejala.

La desaparición de la tarjeta no salió a la luz hasta el día 27 de enero, cuando la oposición pidió explicaciones de por qué no funcionaba el número, como le habían trasladado los vecinos. En esta sesión plenaria, el alcalde explicó que se había dado de baja la línea y la concejala Begoña López relató que no sabía como se había perdido. «Aínda que ás veces quedaba no Concello», añadió. En el pleno, tanto la concejala como el alcalde negaron, ante las preguntas del portavoz del BNG que existiese alguna otra investigación aparte de la desaparición de la tarjeta. El portavoz del PP también preguntó al gobierno por qué se habían borrado las publicaciones del perfil de Facebook del Concello relacionadas con el móvil, ante lo que no hubo respuesta. A esa red social tienen acceso el alcalde, la edil y el otro teniente alcalde. 

El alcalde de Láncara: «Se eu fora ela, dimitiría»

Este sábado, La Voz sacó a la luz la investigación por la presunta usurpación de identidad, y la implicada declaró que no tenía constancia de la denuncia de una entidad bancaria. Recalcó que la querella del constructor es un tema «estrictamente persoal». Además, desvinculó lo sucedido con el teléfono móvil del Concello: «Eu non o usei para nada, unha vez que desapareceu a tarxeta non sei que se puido facer con ese número». De hecho, explicó que ella también recibió mensajes «amenazantes» desde este número.

El mismo día que trascendió, el alcalde pidió a la concejala que dejase el grupo socialista hasta que se resolviese la investigación. «Sempre respetando a presunción de inocencia», aclaró. Begoña López aceptó y el sábado abandonó el PSOE local, pero no dimitió, por lo que conserva su acta. Para sorpresa del propio regidor, en ese mismo momento la concejala le comunicó que tenía que acudir al juzgado a declarar. Algo que le había adelantado el propio constructor que denunció.

Este lunes, el regidor socialista se presentó en el juzgado de Sarria. «Fun citado pola desaparición da taxeta SIM do móbil do Concello, o resto é un tema estrictamente persoal da concelleira», explicó. Piñeiro afirma que confía en las declaraciones de López y en su inocencia, pero confesó que «se eu fose ela, dimitiría». Este lunes era el turno de declaración del empresario, que se ratificó, y de la directora de la sucursal, que no acudió porque no fue notificada, por lo que irá en los próximos días.

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