Esta familia abrió la primera empresa especializada en cerraduras de Lugo en los años 70 y mantiene su posición en la vanguardia
07 sep 2008 . Actualizado a las 02:00 h.Enrique Vázquez Sequeiros, ourensano de nacimiento y fundador de la Cuchillería Sequeiros, trabajó hasta los 46 años por cuenta ajena, pero a esa edad se decidió a cumplir un sueño, el de establecerse por su cuenta. Lo hizo en 1967, con un pequeño negocio de cuchillos y afilado, en la Ruanova número 35, donde aún continúa la empresa. El oficio se lo enseñó su hermano.
Once años después su hijo Enrique Vázquez Carricoba añade al negocio familiar una nueva línea, que por entonces era novedosa en la ciudad, la de la cerrajería. En esta actividad no sólo son punteros en Lugo sino en Galicia. Fueron los primeros en establecer el servicio 24 horas para abrir puertas hace décadas.
A la cerrajería se sumaron hace unos años dos de las nietas de Enrique Vázquez y Saleta Carricoba, Noemí y Alejandra. Ambas, después de realizar estudios universitarios, optaron por el negocio familiar, en el que se criaron, pero en el que tuvieron que formarse y ponerse al día.
Enrique Vázquez reconoce que lo suyo con la cerrajería es vocacional. No hay cerradura de puerta ni de caja fuerte que se le resista y cuanto más complicadas se las presentan, el desafío resulta más interesante para él. Su primer contacto con las cajas fuertes fue en la cuchillería cuando algún cliente recurría a su padre, que es un hombre muy habilidoso y de una gran paciencia, para que tratara de abrirle alguna. La primera que consiguió franquear con una ganzúa lo animó a perfeccionar una técnica que ahora domina.
La cuchillería sigue siendo una parte fundamental del negocio, pero la familia es consciente de que las expectativas de futuro están en la cerrajería. A lo largo de los años supieron mantener la inquietud de ir por delante, tanto en tecnología, con las inversiones que supone, como en el manejo de esta herramienta. Si en su día fueron los primeros en implantar el servicio 24 horas, con la visión de futuro que caracteriza a Sequeiros, ahora lo son en cerrajería electrónica, que está en pleno desarrollo.
Al buque insignia de la Ruanova se sumaron otros dos establecimientos, uno en Montero Ríos y otro en Curros Enríquez. En este último desarrollan la especialidad de los chips electrónicos de las llaves de vehículos, actividad en la que no tienen competencia. La demanda es creciente porque ahora todas las cerraduras son de este tipo y en cinco años de media los usuarios demandan copias.
Una de los adelantos que forman parte de la oferta a su clientela es la llave única en comunidades de vecinos. Cada propietario tiene acceso a una llave con la que puede abrir las puertas de todas las zonas comunes, pero sólamente la de su vivienda.
El negocio de esta familia es puntero en tecnología. Entre las máquinas de las que disponen figuran cuatro que disponen de un ordenador que reproduce las llaves, no las copia. Son las primeras de esta modalidad que funcionan en Lugo.