El barbero Manuel Vigo se jubila este miércoles tras más de 41 años al frente de Romeiro

I.E. MONDOÑEDO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

XAIME RAMALLAL

27 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Tras pasar 41 años y cinco meses afeitando a su clientela, se jubila el barbero Manuel Vigo Couso. Nacido en una parroquia del municipio de Alfoz, este hombre es una auténtica institución en Mondoñedo, como lo es también la Berbería O Romeiro, a cuyo frente quedó tras retirarse su suegro.

Cuenta que la empresa cumplirá en septiembre 121 años (se abrió en 1893). Según acredita un escrito de la Cámara de Comercio, en aquel entonces solo había en Lugo 30 empresas inscritas en la entidad, de las cuales tres eran de Mondoñedo: el taller de Leivas, la Farmacia Lombardero y la Barbería Romeiro.

Manuel Vigo explicaba ayer que cumple los 65 años este lunes, pero la jubilación la pidió para el próximo día 30, justo al acabarse el mes, de manera que cuando este miércoles eche las persianas y se levante del sillón el último cliente, pasará al estatus de jubilado que, asegura, «non me tardaba nada, pero é lei de vida».

Por su carácter amable y jovial se le nota que es una persona feliz con su trabajo. Del negocio afirma que «non hai queixa. O ano pasado baixou pola crise, pero ata entón tiña quince afeitados entre venres e sábado. Non me poido queixar». A su barbería, situada en el emblemático lugar de A Fonte Vella, no solo acude gente de Mondoñedo, también tiene clientes de otros municipios de la comarca.

Y afeita todavía a navaja, si un cliente se lo demanda. Es un instrumento que maneja con habilidad y que supone todo un placer, deja la piel muy suave. Ahora que lo deja le sucederá en el negocio su sobrina y ahijada, que aprendió con el oficio con él.