De las casi 30 personas que se presentaron hasta ahora al reto de comer gratis, solo tres lo consiguieron
31 mar 2018 . Actualizado a las 23:13 h.Zamparse una hamburguesa que supera los dos kilos de peso en 45 minutos es el reto que promueve el restaurante San Martín, de Carral, en el municipio lucense de Begonte. Quienes lo consigan, comerán gratis y, además, tendrán dos consumiciones. Los que no, pagarán 15 euros además de las bebidas y los postres, si es que les queda sitio. Los nutricionistas se echan las manos a la cabeza y advierten que quien se preste a la prueba cargará, por lo menos, con 10.000 calorías que no se sacan de encima ni dándole cincuenta vueltas a la Muralla de Lugo. Por ahora, solo tres de los más de treinta participantes consiguieron el reto.
Los cocineros del establecimiento, Jordan López y Francisco Nebril, reconocen que la súper hamburguesa es como una bomba pero advierten de que lleva productos de primera categoría, especialmente la carne, que es del país. Esos son los ingredientes: 450 gramos de carne de ternera gallega, 400 de cerdo, 100 gramos de queso, 100 de lomo, 100 de cebolla, 100 de tomate y dos huevos en tortilla francesa. Todo eso embutido en un bollo de pan de 550 gramos. Un detalle a tener en cuenta: lleva 50 gramos de lechuga. Es para ponerle el toque verde. «É que con cincuenta gramos de leituga, baixa moito mellor», bromea Jordan.
«Presentáronse moitos asegurando que non terían problemas por comela pero, ao final, quedáronse na metade», contó Francisco Nebril, que lleva veinte años en los fogones y que tiene como especialidad la cocina gallega. «Con bo produto e perexil xa non fai falta moito máis», advierte. En cuanto a la experiencia de la hamburguesa asegura que los clientes tienen que saber que lleva carne de excelente calidad. «Onde haxa uns bos callos, que se quiten estas cousas», aseguró un cliente que tomaba una caña en el establecimiento.
Algún nutricionista recuerda el caso del nadador estadounidense Michael Phelps, que logró 28 medallas y que devoraba comida basura. «Pero pasaba todo el día nadando en la piscina. Una hamburguesa de 2 kilos no se elimina así por así. No es expulsar el queso y la panceta. Ojo: somos lo que comemos», dijo un experto.