El asfalto de Lugo como banda sonora: silencio en la Avenida das Américas, rock duro junto a la estación de tren

LUGO CIUDAD

En la ciudad conviven calles con un gran asfalto con otras que son una pesadilla
02 nov 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Circular por la ciudad de Lugo y hacerlo con comodidad no es solo cuestión de velocidad o de amplitud de la vía. También del asfalto. Y no solo de que esté en buen estado, sino del tipo de capa de rodadura que tiene y, por lo tanto, la suavidad con la que se circula por él y el ruido que genera. En la capital lucense uno puede encontrarse tramos que parecen alfombras a la hora de circular y otros que son como rock duro.

Inicio de la Avenida das Américas
La Avenida das Américas es una de las entradas principales a la ciudad de Lugo. Una calle amplia, de doble carril, que en el mes de septiembre el área de Infraestruturas acabó de asfaltar en su tramo inicial. El trecho que comprende entre las calles Pomar y Manuel Leiras Pulpeiro estrenó una capa de rodadura basada en mezcla asfáltica caliente que aseguró el sellado del firme y que hará que su vida útil se prolongue más. Pero más allá de las cuestiones técnicas, el resultado son unos cientos de metros de circulación silenciosa y suave.
La situación cambia, sin embargo, más allá de la rotonda. A partir de ahí la calle presenta un asfalto viejo y ruidoso. Infraestruturas ya tiene prevista una segunda fase de la mejora de la calle que abarcará el tramo pendiente y que podría incluir también la creación de la rotonda a la altura de la Fonte dos Ranchos que planteó Ciudadanos. El BNG ya se reunió con la formación naranja, al considerar acertada su propuesta, y ahora el tema está en manos de los técnicos.

Monte Faro
La Rúa Monte Faro es un caso peculiar. No es de titularidad municipal, sino que es en realidad la LU-114 propiedad de la Xunta. El tramo que conecta la Avenida da Coruña con Infanta Elena tiene una superficie que recuerda al hormigón en la que el traqueteo es constante debido a las juntas que surcan los dos sentidos de circulación.

CONDE DE FONTAO
Si circular por el arranque de la Avenida das Américas fuese música clásica, hacerlo por la Praza do Conde de Fontao, frente a la estación de tren, sería como escuchar a un grupo de rock mal afinado. Los escasos metros que comprenden la plaza son el paradigma de la incomodidad para el conductor. Y no solo porque la superficie sea de adoquines.
En ese punto de la ciudad uno puede diferenciar dos tipos de adoquinados y un trozo de asfalto que se acompañan de juntas imposibles y de grietas que se fueron remendando como se pudo. El resultado es que circular por ese paso es de lo más incómodo y está muy lejos de ser silencioso.
Aunque esta plaza es de titularidad municipal, sobre ella pesa un elemento clave: la futura intermodal. La construcción de la estación y la urbanización del entorno afectarán a toda esa área, por lo que desde Infraestruturas consideran que no tendría mucho sentido hacer una inversión importante en esa zona si luego se cambia todo y se ve afectado por las obras. En todo caso, aquí entraría el debate de los tiempos, puesto que todavía no hay un cronograma cerrado para la intermodal y cabe la posibilidad de que la obra se dilate en el tiempo. Lo que sí se hizo en su día fue arreglar las aceras.
