La sexóloga que lucha contra Tinder con citas a ciegas en el rural de Lugo: «Viene gente de toda Galicia»

María Guntín
María Guntín LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

La psicóloga y sexóloga lucense Ana Castro Liz
La psicóloga y sexóloga lucense Ana Castro Liz ALBERTO LÓPEZ

Ana Castro Liz organiza eventos para solteros y solteras de entre 40 y 65 años que busquen conocer gente: «Los hay que ya probaron las plataformas, pero prefieren el directo»

22 feb 2024 . Actualizado a las 18:31 h.

La psicóloga y sexóloga lucense Ana Castro Liz les desea «suerte» a los pacientes que llegan hasta su consulta y, en un momento dado, comentan que tienen pensado descargarse Tinder o alguna aplicación de citas similar. Ella cree que los encuentros más tradicionales ganan en tiempos en los que es difícil empezar una conversación paseando por la calle porque todo el mundo lleva la mano en un teléfono. Y este concepto lo comparten buena parte de los pacientes que llegan hasta la experta. Por eso, hace años, Ana decidió poner en marcha un evento que bautizó como Las Tres C, que se traducen en cita, cena y charla. Un punto de encuentro para aquellos que busquen enamorarse o, simplemente, conocer gente nueva y ganarse una amistad. Este domingo tendrá lugar una de estas jornadas en el Restaurante Río Loyo de Paradela y aún quedan plazas disponibles. La comida empezará a las dos de la tarde y después habrá citas y música en directo.

—¿Qué pasará el domingo?

—Reuniré a personas de entre 40 y 65 años para que se conozcan y charlen. A veces lo hago de noche, pero me apetecía hacer una comida porque así hay más margen para charlar. Este evento es solo para solteros, pero me tengo que fiar de lo que me dicen porque eso no sale en el DNI.

—¿Cuésta más que esta iniciativa cuaje en zonas rurales?

—Qué va. Tenemos el aforo casi completo. Viene gente de muchas otras partes de Galicia, no solo de Paradela. Habrá personas de Lugo, A Coruña, Monforte, Pontevedra... Es a mediodía, así que no les importa hacer kilómetros

—¿Usted hará de anfitriona?

—Sí. Dinamizo y acompaño desde el principio a los asistentes, que se sientan en mesas de unas 10 personas para poder charlar. Y al acabar organizo alguna dinámica para que también se conozcan los que están sentadas en mesas distintas. No hago citas cortas y de dos en dos porque son muchos, pero sí quiero que se conozcan todos. Además, habrá música en directo.

—¿Qué espera del domingo?

—Mi pretensión es que charlen, fomentar el diálogo, y que se conozcan.

—¿Por qué personas de entre 40 y 65 años?

—No lo decido yo, son los que suelen anotarse. La gente de menos de 40 tiene otro tipo de facilidades para conocer gente y lasque tiene más de 65 a lo mejor no le apetece tanto salir.

—¿Son tímidos al principio?

—No, yo los acompaño en todo momento y los acojo desde el principio para que estén entretenidos. Aunque vengan solos, hay otras personas que llegan en su misma situación y no pasa absolutamente nada por ello ni hay que tener vergüenza.

—¿Hay parejas que conectan desde un primer momento?

—Sí, yo me doy cuenta por la forma que tienen de mirarse y de hablar. Y me lo cuentan. Aun así, siempre digo que hay que ir poco a poco. A veces nuestra mejor sonrisa es una pantalla, así que yo recomiendo prudencia ya que cada persona busca un tipo de relación distinta.

—¿Acude un perfil de gente que no quiere utilizar aplicaciones?

—Justamente, y también gente que ha probado plataformas pero que prefiere conocer a alguien en directo versus el cuento que puede contarte alguien a través de una pantalla. Hay mucho usuario que se entretiene y no quiere nada más, que descarga aplicaciones para pasar el tiempo o para un escarceo, y esto impide que las personas que realmente quieren conocer a otras puedan llegar a una pareja.

—¿Es difícil conocer gente?

—Antes era fácil hablar con cualquiera en una esquina pero ahora cada uno va a lo suyo, con el móvil en la mano. La gente es muy sociable, pero la forma de relacionarnos ha cambiado e influye en que podamos conectar de manera directa con otras personas. Por eso yo organizo estos eventos, porque quiero que la gente se conozca como antes.

—¿Qué le dice a los pacientes que confiesan que tienen Tinder?

—Pues que tengan buena suerte. Tienen que confluir muchas cosas para encontrar gente afín así porque dentro del anonimato hay todo tipo de perfiles. Hay gente que tiene tan colapsados los mensajes que decide no mirarlos todos, pero a lo mejor entre todos ellos hay uno interesante. La gente que viene a Las Tres C acaba desistiendo de la búsqueda de personas en estas aplicaciones por el estrés que supone.

—¿Y que alternativas hay a la vida entre pantallas?

—Lo ideal sería que la gente vuelva a hablar como se hacía antes, pero ahora si alguien te pide el teléfono por la calle piensas que es un acosador y si alguien quiere invitarte a un café parece que solo te quiere secuestrar. Todo ha cambiado y es difícil.

Dónde: Restaurante Río Loyo, Paradela

Cuándo: Domingo, 25 de febrero

Cómo inscribirse: 658 750 625