Los trabajadores de Confitería Madarro: «Non se pode pechar un negocio tan importante para a cidade de Lugo»

LUGO CIUDAD

Trabajadores de la confitería recogieron firmas durante este lunes en la rúa da Raíña. Además, activaron hace semanas una cuenta para reunir apoyos de manera telemática
22 oct 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Hace casi tres meses que la histórica Confitería Madarro de Lugo cerró sus puertas. Lo hizo debido a un conflicto abierto entre los propietarios, que llevaba años judicializado y que abocó al adiós del negocio, aunque el comunicado de la dulcería hablaba de cierre temporal.
Después de este tiempo y sin respuestas por parte de los propietarios, los empleados de la confitería decidieron iniciar una recogida de firmas para pedir a las partes involucradas «que encuentren una solución de manera urgente». «Se trata de un negocio que funciona, referente en la ciudad, que los clientes quieran que abra y solo falta que se pongan de acuerdo», explicaban este lunes varias de las trabajadoras, que estuvieron durante todo el día recogiendo firmas en la rúa da Raíña. Además, activaron ya hace semanas una cuenta en la red social Facebook bajo el nombre «Salvemos Madarro» para recoger también firmas online a través del portal change.org.
Los trabajadores dicen que necesitan respuestas antes de principios de noviembre, que es cuando se acabaría el ERTE en el que se encuentran tras el cierre del negocio. «No descartamos hacer más jornadas de recogida de firmas porque necesitamos que vuelva a abrirse, nosotros y toda la ciudad», insisten.
Madarro es un negocio con más de 130 años de historia, ampliamente reconocido en la ciudad amurallada y, según los trabajadores, «no podemos permitir que el conflicto surgido por la gestión de la empresa trunque la historia de la confitería».

A propósito para firmar
Ayer, en la rúa da Raíña, mucha de la gente que escuchaba la palabra Madarro no dudaba en firmar, porque «no podemos consentir que se cierre». «Los dulces, la decoración... son inigualables», comentaban algunos de los viandantes, mientras otros decían que no hay Navidad sin los roscones de Madarro. Hubo gente que se acercó desde diferentes zonas de Lugo a propósito para dejar su firma y pedir la reapertura.
Trabajadores y clientes esperan pronto una respuesta positiva por parte de los propietarios: «Queremos que nos comuniquen algo». Por el momento, continúan con su movilización para recaudar el mayor número posible de firmas y demostrarle a los dueños que la hostelería de Lugo necesita la puesta en marcha de esta confitería. «Queremos concienciar a los propietarios a través de la sociedad, que vean lo que demandan.», explicaban este lunes las trabajadoras.
Del obrador de la dulcería llevan décadas saliendo productos que forman parte de la identidad lucense. «Y esperemos que así siga siendo», concluyen.