Los doce empleados de la histórica pastelería de Lugo continuarán otros seis meses en ERTE
14 nov 2024 . Actualizado a las 13:08 h.Dos meses y medio después de cerrar sus puertas en el centro de Lugo, la histórica Confitería Madarro ha entrado en concurso de acreedores. La sociedad propietaria de la misma, integrada por dos familias al 50 %, solicitó el concurso, que el juzgado de Primera Instancia número 2 y mercantil de la ciudad activó, nombrando un administrador concursal.
Ahora será el administrador el que marque la hoja de ruta para buscar lo mejor para la empresa y sus doce trabajadores. Hay que tener en cuenta que si Madarro acude al concurso no es por malos resultados económicos, sino por la imposibilidad de seguir funcionando en el local.
La pastelería, con sus 133 años de historia, ocupaba un bajo en la Rúa da Raíña en el que también tenía el obrador. Un local que pertenece también al 50 % a las dos familias propietarias de la confitería dentro de otra sociedad. Las discrepancias entre ambas impidieron que se prolongase el contrato de arrendamiento del bajo, por lo que la confitería no pudo seguir funcionando.
Al no poder trabajar, el primer paso fue activar un expediente de regulación temporal de empleo que caduca estos días, por lo que se ha renovado por otros seis meses más para los 12 empleados de la firma.
El administrador concursal será el que ahora deberá marcar los pasos a dar, aunque podría activar la venta de la confitería para que, quien la adquiera, pueda volver a abrirla lo antes posible. En su día, una parte de la sociedad ya ofreció a la otra comprar la confitería, pero no cuajó.