Retoques en «la madre» de la A-6

Suso Varela Pérez
suso varela VEGA DE VALCARCE / LA VOZ

PEDRAFITA DO CEBREIRO

Tres puentes: la abuela, la madre y la hija-nieta. En primer término el Camino de Santiago, que usó la primera N-VI, mientras que al fondo se ven el viaducto de Ruitelán (de la N-VI desde 1983 y luego de la A-6 desde el 2011) y el de Samprón construido solo para la A-6.
Tres puentes: la abuela, la madre y la hija-nieta. En primer término el Camino de Santiago, que usó la primera N-VI, mientras que al fondo se ven el viaducto de Ruitelán (de la N-VI desde 1983 y luego de la A-6 desde el 2011) y el de Samprón construido solo para la A-6.

Reforman cerca de Pedrafita el puente que se reutilizó de la N-VI para la autovía

15 abr 2016 . Actualizado a las 19:38 h.

Los trabajadores de Conservación de Carreteras destacados en la zona de la montaña lucense y leonesa conocen a la A-6, la N-VI y al viejo trazado de la N-VI (hoy N-006A) como «la abuela, la madre y la hija o nieta». Es un modo coloquial que usan los operarios de Fomento para poder actuar con mayor rapidez ante un problema o una emergencia. Y el motivo no es otro que salir de dudas ante la confluencia de vías, ya que la construcción de carreteras de alta capacidad por Os Ancares supuso en algún momento el aprovechamiento de las carreteras existentes.

Es el caso del viaducto de Ruitelán -de 422 metros de longitud, y que fue récord de luz en España en su momento- cuando se construyó en los años ochenta. Se inauguró el 9 de agosto de 1983 y supuso un hecho histórico para Galicia, que dejaba atrás décadas de curvas en la vertiente leonesa de Pedrafita. Con la apertura de este puente, la vieja N-VI, a su paso por esta zona del Bierzo, pasaba de usarse por camiones y turismos de toda España a ser una vía de servicio y, una década después, un masificado camino de peregrinos hacia Santiago.

A inicios del 2016, quince años después de la inauguración del tramo de la A-6 entre Pedrafita y Ambasmestas, la Demarcación de Carreteras de Ourense, según informa la Subdelegación del Gobierno de León, se encarga del arreglo del pretil del viaducto de Ruitelán. Y es que este histórico paso fue uno de los tramos que utilizó partes del trazado de la N-VI de inicios de los ochenta para construir la moderna autovía. Este en concreto se dejó para el sentido de la circulación hacia Madrid, mientras que por encima se levantó el imponente viaducto de Samprón, de 560 metros, con tres vanos centrales de 140 metros de luz, la máxima de todas las estructuras de la A-6.

¿Habrá en el futuro que hablar de una «bisabuela»? No se prevén en el largo horizonte la construcción de más carreteras por la zona, aunque sí de ir mejorando y parcheando tanto a «la abuela», a «la madre» como a «la hija-nieta». Y es que el paso de los años afecta a todas.

Un poco de historia

El Plan de Mejora de la Red de Itinerarios Asfálticos, Plan Redia, fue diseñado entre 1967 y 1971. Un intento del desarrollismo franquista por modernizar las vías de España, profundizando en un claro concepto: un país radial, con centro en Madrid, de donde partían las seis principales carreteras nacionales. Y como casi todos los planes de infraestructuras del Estado, en Galicia se fueron aplicando con más retraso que en el resto. Y es que cuando llega el PSOE al Gobierno diseña en 1983 un nuevo plan de que ya incluía 3.250 kilómetros de carreteras, mientras al mismo tiempo inaugura el nuevo tramo de N-VI en Pedrafita y aún tenía pendiente el que unía As Nogais con Becerreá.

Viaducto de Ruitelán

Desde hace unos meses, la Demarcación de Carreteras de Ourense lleva a cabo reformas en este viaducto inaugurado en 1983 y aprovechando para la A-6. El pretil de la parte derecha del puente tenía fracturas y había riesgos de que cayera, dejando huecos en el trazado. Las obras están a punto de finalizar, tras afianzarse el pretil. Aun así, el paso por este puente está recomendado a 100 por hora al ser estrecho y ventoso.