Tres de ellos vagan desnutridos por una carballeira de la parroquia de Liñares
18 feb 2020 . Actualizado a las 13:49 h.Una perra de raza setter lleva más de 9 meses vagando por la parroquia de Liñares, Concello de Pol. El animal dio a luz a nueve cachorros a mediados de diciembre y, desde entonces, ella y los pequeños continúan a su suerte sin tener un hogar estable ni la comida asegurada. La hembra llevó a cuatro de los cachorros a una casa de la zona, que se hace cargo temporalmente de los animales a la espera de que el Concello asuma su responsabilidad y se haga cargo de los animales abandonados, tal y como marca la ley.
«Un día, baixei as escaleiras e vin a cadela cos nove cachorros. Foinos levando por distintas zonas da aldea e finalmente deixou catro aquí, un foi parar á casa dun veciño e os outros tres están nunha carballeira morrendo de fame», explica una mujer de Liñares. Por el momento, es ella la que se encarga de darles de comer, pero asegura que cuando aparecieron los cachorros llamaron al Concello y que les dijeron que no era responsabilidad suya. También contactaron con Medio Ambiente, que les aclaró que denunciarían el caso y que era el Concello de Pol el que debía actuar de inmediato.
«Nós o que queremos é que os leven de aquí, porque non nos podemos facer cargo de tantos animais. Polo momento, estámoslles dando leite e pan, pero non pode seguir esta situación durante moito tempo», aseguran desde esta casa de Liñares.
Los cachorros que malviven en la carballeira, explican los vecinos, están desnutridos y, si siguen allí, es probable que les quede poco tiempo de vida.
A la espera de conocer el destino de los animales perdidos por el monte de la zona, los cuatro que viven en la palleira de esta casa de Liñares esperan encontrar pronto hogares definitivos. Son de color negro, cruce de setter y pastor alemán y serán de tamaño grande. La madre de los animales acude a diario hasta la casa para verlos y se deja también ver por la aldea, seguida por los cachorros que aún van con ella.
El alcalde de Pol, Lino Rodríguez, explica que «non é que non fagamos nada ante este caso, pero non é fácil. A cadela non se deixa coller e non sabemos onde metelos. Temos problemas de espazo que estamos resolvendo», asegura el regidor, que también explica que «Medio Ambiente traslada aos Concellos todos os problemas» y que «o que ten que facer é dar axudas porque sabe que non hai unha partida destinada para isto». El alcalde asegura que cada animal que llevan a la protectora de Animales y Plantas de Lugo acarrea un gasto de entre 400 y 500 euros.