El gobierno local prevé uniformar la imagen de los locales y espera que el cambio ayude a lograr más vendedores
24 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El cambio de los puestos que aún quedan en la plaza de abastos de Vilalba se realizará de modo inminente. Las próximas semanas son las fechas elegidas para el traslado de los placeros al sótano del edificio, que se reformó hace meses para acoger esa actividad.
La reforma realizada entonces, que contó con fondos de la Xunta y del Concello y que realizó la empresa local Construcciones Sanjurjo, buscaba dar actividad a una parte de las instalaciones que carecían de uso. El edificio está en pleno centro y tiene un acceso por la Praza da Constitución, aunque la parte a la que se trasladarán los puestos cuenta con entrada por la Rúa dos Pepes y está además conectada con el aparcamiento subterráneo de la plaza.
El traslado implicará también que los puestos -ahora solo hay tres, una carnicería y dos pescaderías- tengan una imagen algo uniforme en la parte de atención al público. La posibilidad de lograr más puestos para el recinto -relacionados fundamentalmente con la alimentación, como aclaró ayer el alcalde, Gerardo Criado- se prevé tratar en una próxima reunión con la directiva de la asociación de empresarios.
Por otra parte, el traslado de los placeros ha animado al Concello a estudiar algún otro uso para la planta baja, donde ahora están situados los puestos. Una posibilidad sería el traslado de algunos servicios municipales o la ubicación en esa zona de algún servicio de nueva creación. En la primera planta estuvo instalada la oficina de rehabilitación hasta su traslado al segundo piso de la Casa do Concello, tiene su sede el Consello Regulador de la Denominación de Orixe San Simón da Costa y hay locales de otros colectivos.