El precio medio de los billetes se ha hundido casi un 50 % con respecto al verano del 2019. Los españoles optarán en julio y agosto por destinos nacionales y Santiago será uno de los favoritos
16 may 2021 . Actualizado a las 22:55 h.Las aerolíneas continúan soportando estoicas -y con mucha ayuda de los diferentes gobiernos- su maltrecha situación. No son buenos tiempos para el turismo y, por tanto, para su negocio. Y con el virus todavía acechante, a pesar de que la vacunación marcha a ritmo cada vez mayor, la ley de la oferta y la demanda sigue marcando la actualidad de un sector que empieza a fiarlo todo a la campaña de verano. Eso sí, con muchas dudas. Porque si la inmunización no avanza según lo previsto y las cosas se tuercen lo más mínimo, las empresas que conforman este nutrido sector no conseguirán levantar el vuelo de ninguna manera.
La situación no es todo lo halagüeña que prometía ser a estas alturas del año. Y para muestra, un botón. Porque el precio de los billetes de avión se ha desplomado este aciago 2021 en comparación con el verano previo a la pandemia. Según los datos de un reciente estudio de eDreams, hacerse con un vuelo para este verano es un 47 % más barato que en el 2019: el precio medio se sitúa en 150 euros. Incluso mirando hacia el verano del terrible año 2020 -cuando las vacunas todavía no habían entrado en el terreno de juego y la situación pintaba mucho más inestable que en la actualidad- los costes de contratar un vuelo para irse de vacaciones este año son mucho menores que en la época estival del año pasado. No hay más que comparar los 150 euros que se espera que gasten de media este año los españoles en aviones, con los 240 euros del 2020 y los 280 del 2019.
Hace unas semanas, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, trataba de subir los ánimos dejando abierta una importante espita a la esperanza. Lo hacía con una simple frase: «Los españoles ya pueden planificar sus viajes», aseguraba Maroto, que dejaba entrever que, entre los planes del Gobierno, está permitir que este año el verano vuelva a ser lo más parecido posible a la tan ansiada antigua normalidad. Las cosas mejorarán con respecto al 2020 -al menos eso es lo que esperan-, pero reconocen que las cifras del turismo quedarán todavía lejos de las pre-pandémicas.
Los ciudadanos españoles aportarán su granito de arena y mirarán por el turismo patrio. Al menos, así lo muestra el estudio de eDreams. Y es que la agencia de viajes se ha puesto manos a la obra para tratar de analizar y aventurar cuáles serán los viajes más reservados por parte de los españoles para el verano. Y una vez más, unas islas se erigen como las grandes favoritas. Al igual que en años anteriores, el archipiélago balear se posiciona como el destino favorito de los turistas nacionales. Las playas y chiringuitos de Menorca, Ibiza y Palma de Mallorca se convierten en el anhelo de los turistas de nuestro país y ocupan los tres primeros puestos en el ránking de lugares más demandados. La cosa va de islas, porque Tenerife, Gran Canaria y Lanzarote se sitúan en los siguientes lugares del ránking.
Los destinos del sur también tienen su nutrido grupo de adeptos. Porque Málaga, Sevilla y Fuerteventura también copan parte de las reservas que se realizan en los portales en estos meses.
Y hay una urbe que, para orgullo de los gallegos, este año ha logrado ganarse un puesto de honor en esta particular lista. A las puertas de un Xacobeo que se prevé más raro de lo habitual, pero cargado con el mismo simbolismo de otros años, Santiago de Compostela se cuela entre los destinos favoritos de los consumidores nacionales para este verano. Aprovechando los meses estivales, muchos se dejarán encandilar por la magia del Apóstol, el buen comer gallego y el encanto de una ciudad que vivirá su año grande este 2021 (y parte del 2022, puesto que el Xacobeo se alargará más de lo previsto como consecuencia del coronavirus).
Lo de cruzar la frontera, este año, es una cuestión algo más peliaguda. De hecho, a diferencia de anteriores épocas vacacionales, los destinos internacionales quedan completamente descartados en el ránking que suele elaborar eDreams. Para la época de calor de este año, la opción que gana por goleada es sin duda la ciudad nacional.
Pero los españoles no pierden la esperanza de poder cruzar -más pronto que tarde- los límites del país. Y para los meses ya de verano tardío y comienzos de otoño, hay algunos destinos europeos que empiezan a aparecer con fuerza en las reservas. Concretamente Roma o París.
¿Y los que vienen de fuera?
No solo de los turistas patrios vive el sector. Hoteles, chiringuitos, restaurantes y todos los negocios que giran alrededor de este importante sector miran hacia el extranjero con cierta esperanza. Algunos organismos prometen que las cifras serán mucho mejores que las del año pasado y que en España habrá más turistas. De hecho, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) prevé la llegada de entre un 30 y un 40 % de los viajeros internacionales que venían a nuestro país antes del estallido de la crisis sanitaria. Tirando de cálculos, eso se traduce en un número de visitantes que oscilará entre los 8,5 y los 11,5 millones. La realidad es que los números son mucho menores que antes de la pandemia, pero -mirándolo por el lado positivo- también mucho mayores que los del pasado 2020, un año que pasará a la historia como uno de los peores del sector. Y para finales del 2021, las cosas remontarán de manera importante.