Italia es el país europeo con la tasa de empleo femenino más baja: solo el 56,5 % de las mujeres de entre 20 y 64 años están empleadas, frente al 70 % de media en la UE. Las mujeres representan el 64 % de los inactivos (los parados que no buscan empleo) y el 49,2 % de las que han encontrado trabajo entre el año pasado y los primeros seis meses del 2024 tienen un contrato de tiempo parcial, frente al 27,3 % de los hombres. Un reciente informe del Instituto nacional de Análisis de Políticas Públicas recuerda que una mayor participación femenina en el mercado laboral sería estratégica en pleno invierno demográfico y destaca la persistencia de factores que la dificultan. Por ejemplo, el cuidado familiar, que casi exclusivamente ejercen las mujeres.