
El copiloto de Salvaterra Cándido Carrera ha convertido en profesión su pasión por el automovilismo, logrando el título en el WRC Academy
22 nov 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Convertir una pasión en profesión no está al alcance de todos. Sin embargo, Cándido Carrera (Salvaterra de Miño, 1980) lo ha logrado. Ha conseguido que «cantar notas» desde el asiento del copiloto se convierta en su trabajo. Y lo cierto es que lo desempeña bien. Muy bien. Acaba de proclamarse campeón del mundo de copilotos en la World Rally Car Academy formando equipo con el piloto asturiano José Antonio Suárez, Cohete, que se ha adjudicado el subcampeonato en la categoría de pilotos.
La pasión de Cándido Carrera por el mundo del motor viene de lejos. «Empecei nisto como aficionado. Ía con meu irmán aos ralis. Sempre me gustaba o tema dos mapas, ir dun sitio a outro, e tamén faciamos trastadas na casa arranxando coches», recuerda. Cada vez que veía por televisión a Luís Moya o Nicky Grist se le iluminaba la cara. Quería ser como ellos. «É o que sei facer e o que me gusta. Levo once anos correndo e sempre como copiloto. Non o cambio por nada. Non me gustaría pilotar», afirma con contundencia.
Sus primeros kilómetros en el «asento do medo» los vivió con un piloto de la zona, Luis Lemos, en un Seat Panda. Desde entonces ha pasado más de una década, y lo que comenzó como una aventura, «foise volvendo máis serio». Cursos con Diego Vallejo y Moncho López, tramos con Moncho Seoane y horas y horas al lado de diversos pilotos le dieron tablas. En el 2005 se adentró en el Campeonato de España de la mano de Óscar Garre, «e aí deixou de ser unha afición», aunque su gran salto llegaría un tiempo después de la mano del asturiano Cohete Suárez. «Comecei a correr con él cando aínda levaba a «L» de novato no coche. No 2010, cando saímos na última proba do Rali de Cataluña dixome que para o ano seguinte, se había orzamento, me levaría con él para o Mundial». Esas ya eran palabras mayores.
Excedencia en el trabajo
La exigencia de participar en un Campeonato del Mundo como el Academy, el torneo monomarca para pilotos menores de 25 años, puso a Cándido Carrera en un brete. Tocaba decidir entre dar un paso al frente o quedarse en un segundo plano, y el copiloto de Salvaterra se lanzó de lleno. «O tren só pasa unha vez. Había que deixar o traballo para adicarse só a iso, e alá fomos. Pedín unha excedencia laboral na empresa, e aquí sigo. Tiven sorte porque dende que comecei a saír ao Nacional sempre me deron facilidades».
Desde ese momento la vida de Cándido Carrera se centra en el motor. «Disto dase vivido. É moi difícil e non se vive de marabilla, pero pódese vivir como unha persoa normal», señala Cándido.
La victoria en la Academy
En 2011 Cohete y Carrera tuvieron su primera aventura en la WRC Academy. Hicieron un digno papel, y sobre todo aprendieron. Esa experiencia ha sido clave para que este año se hayan subido al podio. «Dende o principio plantexámonos ir a pola vitoria, e a melloría nos ralis de terra permitiunos lograr o título en copilotos e o subcampionato en pilotos en Barcelona», en la última jornada. Un éxito que Carrera no quiere que sea el último. «Son dos que sempre mira adiante. Se miras para atrás non avanzas». El copiloto solo piensa en seguir mejorando.
«O tren pasa unha vez. Pedín unha excedencia na empresa para poder competir no Mundial»
Copiloto de Salvaterra de Miño