«Y ASÍ, fatigado de este pensamiento» (Quijote, capítulo III), decidí lo que decidí, aunque no pude ejecutar la decisión. Necesitaba complicidad y la tuve. Cianuro es un anión que da nombre a todas las sales derivadas del ácido cianhídrico (HCN). El cianuro por antonomasia es el cianuro sódico (NaCN): polvo cristalino y delicuescente (absorbe el vapor de agua de la atmósfera). Se obtiene por la reacción del ácido cianhídrico y el hidróxido de sodio. Se emplea en la extracción de oro y plata a partir de sus minerales, en galvanoplastia (obtención de copias metálicas, de una determinada matriz, por electrolisis), en limpieza de metales y en síntesis de sustancias orgánicas. Es un veneno muy activo. Se puede usar para ejecutar últimas voluntades (propias o ajenas). De él decía el profesor Bermejo, catedrático de Analítica en Santiago: si alguien tiene la humorada de suicidarse bebiendo una disolución de cianuro, muy probablemente no le dé tiempo a poner el vaso en la mesilla de noche.